Procesan al ex vicepresidente de Uruguay
MONTEVIDEO (AP) La jueza de crimen organizado Beatriz Larrieu procesó el martes al ex vicepresidente de Uruguay, Raúl Sendic, por haber cometido los delitos de abuso de funciones y peculado mientras presidió la petrolera estatal ANCAP durante el gobierno de José Mujica (2010-2015).
Larrieu sostuvo que el entonces presidente de ANCAP realizó actos arbitrarios en abuso de su cargo, al exceder el ámbito de su competencia y violentar las formalidades que impone la normativa. La jueza también consideró probado que Sendic usó las tarjetas corporativas de la empresa para hacer numerosas compras en tiendas de ropa, supermercados, calzados deportivos, electrónica, joyería y librerías, entre otros, en nuestro país y en el exterior, sin los correspondientes comprobantes justificativos.
El indagado no ha podido explicar razonablemente, en ninguna instancia --judicial o extrajudicial-- los gastos realizados. Tampoco ha presentado recibos de los reembolsos que realizó en los casos que correspondía, sostiene el fallo.
Sendic, sin embargo, no irá a prisión ya que el fiscal Luis Pacheco, actuante en el caso, no solicitó esa pena. La jueza señaló en su fallo que no corresponde que un juez dicte pena de prisión si el fiscal no la solicita.
La oposición y la prensa han calificado la gestión de Sendic como plagada de irregularidades y actos de corrupción.
Sendic renunció en septiembre de 2017 jaqueado por las denuncias de corrupción. Con un fuerte respaldo de Mujica, había sido electo en 2014 como compañero de fórmula del actual presidente Tabaré Vázquez.
La renuncia, la única de un vicepresidente en funciones en la historia del país, se produjo luego de que el Tribunal de Conducta Política del Frente Amplio, la coalición de izquierda en el gobierno, determinara que Sendic había incurrido en un proceder inaceptable en la utilización de dineros públicos y lo acusara de mentir en sus explicaciones.
La gestión de Sendic al frente de ANCAP dejó tal déficit que en 2016 el Parlamento debió aprobar una inyección de capital en la empresa de 872 millones de dólares para evitar su quiebra. Tales pérdidas provocaron un escándalo incluso dentro del oficialismo. El actual ministro de Economía, Danilo Astori, responsabilizó del caso a Sendic y al anterior presidente Mujica.
El desprestigio del ahora ex vicepresidente comenzó en 2016 cuando admitió que no es licenciado en genética humana aunque así se presentó durante años.
"Lo que hice fue una preparación para la docencia genética, que era un curso rápido", le dijo al diario El Observador en febrero de 2016. Luego Sendic se embarcó en explicaciones contradictorias y dijo que presentaría el título, cosa que no ocurrió. Incluso dejó en falsa escuadra a la senadora Lucía Topolansky, esposa de Mujica, quien en su defensa dijo haber visto el título que nunca apareció.
La sumatoria de denuncias hizo de Sendic blanco permanente de la crítica de sus propios compañeros, la oposición, la prensa y las redes sociales.
Es el bullying más fantástico que he visto en mi vida y me causa asombro el ensañamiento, señaló el presidente Vázquez a comienzos de julio. Sin embargo, conforme sectores y personalidades de la gobernante coalición Frente Amplio se sumaron a los cuestionamientos, Vázquez terminó por aceptar la renuncia de Sendic.
Hijo de uno de los líderes de la organización guerrillera Tupamaros, Sendic residió en Cuba mientras Uruguay estaba bajo la dictadura militar (1973-1985).
De 55 años, al comienzo del gobierno de Vázquez en 2015, Sendic aparecía como una de las principales figuras de cambio generacional del Frente Amplio.