Como madre, Serena Williams gana en retorno a un Gran Slam
PARÍS (AP) Para todo lo que ha cambiado en los 16 meses que han transcurrido desde la última vez que Serena Williams jugó en un torneo de Grand Slam _ se casó y es madre _ lo que se vio el martes en el Abierto de Francia fue bastante conocido.
La moda, esta vez con un traje de licra negro y cinta roja que le cubrió todo el cuerpo. Sus "¡come on!". Los potentes saques le permitieron acumular 13 aces. Su juego de devolución con el que logró tres quiebres seguidos de servicio.
Y, claro que sí, la victoria.
Compitiendo como mamá por primera vez en un Grand Slam, y apenas nueves meses después de dar a luz a su hija, Williams derrotó el martes por 7-6 (4), 6-4 a la checa Kristyna Pliskova, número 70 del mundo, en Roland Garros.
Establecida como una figura transcendental del deporte e ícono cultural, Williams ahora lleva el título de madre profesional.
Bueno, Olympia es mi prioridad. Lo que sea, esa es mi prioridad. Le he dado tanto al tenis, y el tenis me ha dado tanto, y no puedo estar más agradecidad, dijo Williams. Ella es mi prioridad y todo gira en torno a ella.
La estadounidense de 36 años no participaba en una de las cuatro grandes citas del tenis desde el Abierto de Australia en enero de 2017, cuando conquistó su 23er título de Grand Slam. Ello quebró el empate con Steffi Graf por la mayor cantidad en la era abierta del tenis. La jugadora con más títulos es Margaret Court, con 24, pero esos incluyen otros que ganó en la era aficionada.
No fue hasta después de Australia que Williams reveló que jugó estando embaraza. Su hija nació el 1 de septiembre y Wiliams se casó con Alexis Ohanian, el cofundador de Reddit, en noviembre.
Solo estoy feliz de poder ganar un partido aquí, dijo Williams al público en la pista Philippe Chatrier, el estadio principal del torneo. Contenta de tomarlo paso a paso.
Poco antes en la misma pista, Rafael Nadal estuvo cerca de ceder un set en el torneo por primera vez en tres años pero el español supo sentenciar su aplazado estreno con una victoria 6-4, 6-3, 7-6 (9) ante el italiano Simone Bolelli.
Al empezar su asalto por un 11mo título en Roland Garros, Nadal debió levantar cuatro bolas de set ante el jugador que superó la ronda preliminar para poner fin al duelo que abarcó dos días.
Nadal quedó ahora con marca de 80-2 en París.
Otra vez abrumador favorito en su superficie predilecta, Nadal perdía 6-3 en el desempate ante el número 129 del ranking. La reacción fue impresionante: un ace, una volea de revés y una devolución cruzada en sucesión nivelaron la pugna.
Recurriendo a golpes muy al fondo y otros de sutil ejecución, Boletti obtuvo otra oportunidad para ganar el set al dejar corto un revés, pero Nadal respondió con un potente saque en el siguiente punto.
La verdad es que el partido se hizo complicado, reconoció Nadal. Tocó sufrir y aguantar. Pero ganar esta clase de partido es importante para el futuro.
Fue uno de los seis partidos que fueron interrumpidos la noche del lunes debido a la lluvia. Luego que otros chubascos frenaron la acción otra vez el martes, Nadal salió lanzado a cerrar pronto el duelo.
El número uno del mundo arrancó ganando los primeros tres games del día, pero Bolelli no se arredró y plantó cara con sus devoluciones.
Simone ha sido muy agresivo y tuvo muchas oportunidades en el tercer set, dijo Nadal.
De menos a más, el argentino Juan Martín del Potro no dio muestras del desgarro en el aductor izquierdo que le afectó hace dos semanas en el Abierto de Italia y venció 1-6, 6-1, 6-2, 6-4 al francés Nicolas Mahut.
El próximo rival de Nadal será el argentino Guido Pella, quien superó 6-2, 6-3, 6-4 al portugués Joao Sousa.
Me quiero morir, dijo Pella sobre enfrentar al español. Pero hasta los más grandes en algún momento pierden. ¿Te imaginas que sea conmigo? Sería un sueño.
También el martes, el uruguayo Pablo Cuevas despachó 6-4, 6-3, 6-2 al eslovenio Aljaz Bedene y el argentino Horacio Zeballos doblegó 6-4, 6-7 (3), 6-4, 6-2.
En un duelo ex campeones del torneo femenino, la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza debutó con una victoria 7-6 (0), 6-2 frente a la rusa Svetlana Kuznetsova. Tras vencer a Serena Williams en la final de 2016, Muguruza perdió en la cuarta ronda el año pasado.