Vuelve la violencia a las calles de Managua
MANAGUA (AP) La violencia volvió a las calles de Nicaragua el lunes después que estudiantes que tomaron un nuevo recinto universitario se enfrentaran con policías antimotines desatando una fuerte represión que ha tenido como resultado la quema parcial de un medio de comunicación, varios heridos y detenidos.
Los nuevos enfrentamientos se dieron mientras el gobierno y representantes de la sociedad civil, estudiantes y sector privado, intentaban retomar el diálogo que fue interrumpido de manera indefinida la semana pasada en medio del deterioro de la crisis por las protestas que han dejado al menos 84 muertos.
Los estudiantes de la Universidad de Ingeniería de Nicaragua tomaron las instalaciones pidiendo justicia para los caídos en las protestas y la salida del poder del presidente Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Paramilitares afines al gobierno atacaron a los estudiantes, que fueron defendidos por algunas personas, y además de perseguir a quienes los atacaban prendieron fuego parcialmente al edificio de la oficialista Radio Ya.
La Policía Nacional desplegó a los antimotines en el centro de Managua y desde entonces hay máxima tensión y un número no precisado de lesionados con armas de fuego. En medio de los disturbios, oficiales de policía agredieron a una reportera y a un fotógrafo de la agencia española EFE y otros medios locales.
Una delegación de la Amnistía Internacional que se encuentra en el país verificando la situación constató lo sucedido, según constató Erika Guevara-Rosas, Directora para las Américas de Amnistía Internacional.
En Masaya, una de las ciudades que más ha sido afectada por la represión gubernamental, el edificio de la Fiscalía y Procuraduría de General fueron incendiados por desconocidos.
Los obispos de la Conferencia Episcopal, que fungen como mediadores y testigos del diálogo, reunieron a tres representantes del gobierno y tres de la alianza cívica en busca de la continuidad los encuentros interrumpidos desde la semana pasada y emitieron un comunicado en el que hacen un llamado al cese de la violencia y mostraron su disposición de discutir la agenda de democratización de Nicaragua.
La reunión buscaba reanudar las pláticas suspendidas el miércoles pasado por los obispos luego de que el gobierno se negara a discutir la propuesta de la oposición de adelantar las elecciones de 2021 para anticipar la salida de Ortega, en el poder desde 2007.
El gobierno, a su vez, exigió que se levanten los atascos de carreteras en el marco de las protestas que estallaron el 18 de abril.