Testigos: canadiense linchado en Perú tenía una pistola
LIMA (AP) Testigos en el linchamiento de un canadiense en la Amazonía de Perú informaron a la fiscalía que poco antes de la muerte del extranjero vieron que una pistola cayó de su mochila en una remota comunidad donde indígenas lo acusaron de asesinar a una reconocida curandera de la zona.
"El testimonio de una persona que ha visto dice que en el momento que lo agarran al canadiense se cayó una pistola plateada de su mochila", dijo el miércoles a The Associated Press Omar Inca, el vocero de la fiscalía en la noreste región Ucayali, en cuya jurisdicción pobladores lincharon a Sebastian Woodroffe el 19 de abril.
Otro testigo, un policía local, también relató que vendió una pistola a Woodroffe el 3 de abril. No se ha determinado si los tres casquillos de bala hallados alrededor del cadáver de la curandera Olivia Arévalo coinciden con los que pueden dispararse con la pistola vendida al canadiense.
El vocero de la fiscalía indicó que los nombres de los testigos se mantienen en reserva por mandato de la ley.
En la víspera, la policía encontró en la comunidad de Victoria Gracia --donde vivía la curandera y el canadiense de 41 años fue linchado horas más tarde-- partes de una motocicleta en la que supuestamente llegó Woodroffe.
Inca dijo que todavía se espera los resultados de la prueba de absorción atómica que se realizó al cadáver de Woodroffe y determinará si el canadiense disparó poco antes de su muerte. Su cadáver fue exhumado el sábado tras permanecer enterrado en una zona remota y en la víspera llegó a Lima para luego ser enviado a su país natal.
Antes de su muerte, un grupo de vecinos de la comunidad acusó a Woodroffe de asesinar a la reconocida curandera Olivia Arévalo, de 81 años, reconocida a nivel estatal por difundir la medicina tradicional y los cantos sagrados de su pueblo.
La justicia ha ordenado la captura de dos vecinos de Victoria Gracia que aparecen en un video grabado con un teléfono celular donde se observa como ataban una cuerda al cuello del canadiense que imploraba por su vida. Después lo arrastran varios metros, luego de lo cual Woodroffe queda inmóvil.
Woodroffe, natural de la provincia canadiense de Columbia Británica, llegó a la Amazonía para aprender medicina tradicional con el fin de ayudar a quienes sufran de adicciones.
Cada año turistas extranjeros viajan a la Amazonía para experimentar con la ayahuasca, brebaje alucinógeno elaborado con plantas nativas. Tribus indígenas de Brasil, Perú, Ecuador y Colombia lo consideran una cura para varias dolencias, pero también es cada vez más consumido por quienes buscan experiencias que alteren la mente, a veces con consecuencias mortales.
En 2015, un canadiense apuñaló fatalmente a un inglés después de que los dos bebieran ayahuasca en una ceremonia espiritual a unas horas en auto de donde mataron a Woodroffe.