Controlan incendio en reserva de biósfera de Nicaragua

MANAGUA (AP) El gobierno de Nicaragua logró apagar el incendio que por nueve días consecutivos ardió en la reserva de biósfera Indio Maíz arrasando con 5,484 hectáreas de bosque húmedo tropical.

"Hemos controlado y extinguido el fuego", dijo el viernes la vocera del gobierno Rosario Murillo, quien reconoció el trabajo de 1,500 personas entre Defensa Civil, Ejército y voluntarios que han trabajado en la zona para controlar el siniestro detectado el pasado 3 de abril.

El fuego no se pudo apagar antes debido a las condiciones geográficas, el acceso al agua y por el comportamiento de los vientos en ese lugar --una zona selvática--, lo cual llevó al Estado a pedir ayuda a gobiernos de México, El Salvador, Honduras y Estados Unidos. Un helicóptero cisterna de la fuerza aérea mexicana fue el primero en llegar y el que más incidencia tuvo en el control del fuego arrojando agua desde el aire.

Murillo dijo que el viernes por la mañana se hicieron vuelos de reconocimiento y exploración en las zonas y que pudieron comprobar que ya no hay flamas ardiendo en la vegetación. No se aprecian focos de fuego. Hay elementos humeantes, como árboles, pero se están liquidando las consecuencias para evitar rebrotes, dijo Murillo a través del oficialista Canal 4 de televisión.

El siniestro provocó que movimientos ambientalistas y jóvenes independientes realizaran marchas en la capital, en las cuales demandaron más beligerancia al gobierno para acabar con el fuego. El gobierno no se quedó atrás y realizó una contra marcha con empleados estatales y estudiantes afines al gobernante Frente Sandinista, que apoyaron las acciones emprendidas en la reserva.

Las marchas coincidieron en dos ocasiones en dos puntos de la capital y se registraron algunos roces entre los bandos, pero sin enfrentamientos graves debido a que la policía intervino. No obstante, los ambientalistas señalaron que las autoridades se parcializaron a favor de los marchistas estatales. No hubo detenidos ni heridos.

Durante todo el desastre, sólo un joven lugareño de la reserva que colaboraba en atacar el fuego resultó con quemaduras de segundo grado en las piernas, pero se encuentra estable.

Ahora viene lo más importante después de haber controlado el fuego: evaluar daños y tomar medidas contra los que provocaron el fuego, que el mismo gobierno ha aceptado no se encendió naturalmente, sino que fue provocado, dijo a The Associated Press el ambientalista y científico Jaime Incer Barquero.

El presidente Daniel Ortega dijo el jueves por la noche que las autoridades correspondientes realizan una investigación sobre el origen del fuego.

La región es el hogar de indígenas Rama y Kriol, así como de una amplia variedad de animales representativos de la fauna centroamericana, como las lapas verde y roja, de la familia del loro y que se encuentran en peligro de extinción.