MADRID (AP) - Para el Real Madrid, se trató de sobrevivir a toda costa. Las jugadas de lujo quedaron para otras circunstancias.
Nada de tripletas o chilenas de Cristiano Ronaldo. Toni Kroos y Luka Modric no fueron los patrones en el mediocampo. Sin Sergio Ramos, la defensa hizo aguas.
El Madrid necesitaba encontrar la manera de seguir adelante en la Liga de Campeones con su desteñida versión ante Juventus, y lo hizo más que nada a fuerza determinación, culminada con el penal convertido por Cristiano en los descuentos de la derrota 3-1 que alcanzó para imponerse 4-3 en el marcador global.
"Ya pensaba que íbamos a sufrir", dijo el técnico madridista Zinedine Zidane. "Ellos hicieron un buen planteamiento y nosotros no. Hemos tenido dificultades a la hora de manejar nuestro partido".
El sufrimiento del miércoles no había sido previsto, en particular tras la resonante victoria 3-0 de la ida en Turín la semana anterior, con Cristiano marcando uno de sus dos goles con una acrobática chilena.
Todo hacía presagiar un trámite de rutina para el equipo español en la ida, pero Juventus salió como tromba en el estadio Santiago Bernabéu y abrió el marcador apenas en el segundo minuto. El pánico se hizo sentir cuando Mario Mandzukic anotó su segundo gol antes del descanso y la impensable remontada quedó casi fructificada cuando Blaise Matuidi marcó el tercero en el primer cuarto de hora del complemento.
Pero justo cuando el partido parecía encaminado para una prórroga, el árbitro señaló un polémico penal cometido a Lucas Vázquez dentro del área en el tercero y último minuto de los descuentos. Cristiano se encargó de definir desde los 12 pasos, llevando al Madrid a las semifinales por octava vez seguida.
"La Champions League no perdona a nadie y hay que estar concentrado todos los minutos de un partido en esta competición", dijo Vázquez. "Supimos sufrir hasta el final y ese gol de Cristiano es muy importante".
El Madrid la pasó mal en su zaga por las ausencias de Ramos por suspensión y de Nacho Fernández por lesión, lo que obligó la presencia del inexperto Jesús Vallejo como central junto a Raphael Varane. Los dos primeros dos goles de la Juve fueron con cabezazos dentro del área, y el tercero fue tras un clamoroso error del arquero Keylor Navas.
Sufrir en la Champions es habitual para el Madrid, el equipo más laureado de la competición con 12 coronas y triunfador en tres de las últimas cuatro ediciones.
Fue lo que le ocurrió el año pasado ante el Bayern Múnich en los cuartos de final. Perdió 2-1 tras los 90 minutos del choque de ida jugado en casa, pero Cristiano anotó dos veces en la prórroga para avanzar. Tenía una ventaja de tres goles contra su vecino Atlético de Madrid en las semifinales, pero la pasó mal en la vuelta al encajar dos madrugadores goles en la ida y terminó logrando el pase pese a la derrota 2-1.
Su rival en las semifinales se sabrá en el sorteo el viernes, con Liverpool, Bayern Múnich y Roma como los otros en carrera.
"Aquí no hay favoritos", advirtió el lateral derecho merengue Dani Carvajal. "Los cuatro que hay en semifinales pueden alzarse con el título y estamos concienciados para intentar llegar a (la final de) Kiev".