Junta pide reformar el sistema de pensiones de Puerto Rico
SAN JUAN (AP) Una junta federal que supervisa las finanzas de Puerto Rico exigió el miércoles que se apliquen recortes al frágil sistema de pensiones de la isla y dijo que analizará elevar el salario mínimo sólo si se cumplen ciertos criterios.
Las exigencias fueron esbozadas en varias cartas enviadas al gobernador Ricardo Rosselló, que en diversas ocasiones se ha negado a imponer un recorte de 10% a las pensiones de más de 1.000 dólares mensuales y trata de incrementar el salario mínimo de 7,25 dólares la hora a 8,25 dólares para 2021.
La junta supervisora estadounidense también recomendó reducir de inmediato las vacaciones obligatorias y los permisos por enfermedad a 14 días por año en lugar de siete como propone Rosselló. Dijo además que el otorgar un aguinaldo navideño debería ser algo opcional para 2019, como parte de una propuesta de reforma laboral que muchos en Puerto Rico han rechazado ampliamente.
"Las reformas amplias y profundas son vitales para el futuro de Puerto Rico", dijo el presidente de la junta, José Carrión, en un comunicado. "Seguiremos trabajando en colaboración con el gobierno para hacerlo bien y nos detendremos sólo cuando hayamos elaborado un mapa de ruta para la transformación de la economía de la isla".
Horas más tarde, Rosselló anunció durante un discurso televisado que retiraba la medida de reforma laboral que les había presentado recientemente a los legisladores. Señaló que la propuesta del organismo federal incrementaría la pobreza en Puerto Rico, una isla de 3,3 millones de habitantes con una tasa de pobreza de casi el 45% antes del impacto del huracán María.
Rosselló también rechazó los llamados para implementar recortes a un sistema de pensiones que enfrenta pasivos por casi 50.00 millones de dólares.
Esa injusta y abusiva medida tendrá mi tenaz oposición, declaró el gobernador, y añadió que el organismo federal estadounidense se atribuye poderes que no tiene.
Además, el gobernador dijo que las condiciones que impone la junta de control harán que sea casi imposible incrementar el salario mínimo en 25 centavos. Estas exigencias incluyen aumentar la tasa de participación laboral de la isla de casi el 40% a una cifra de entre el 45 y el 55%.
Rosselló dijo que su gobierno responderá en breve al organismo. La junta tenía programada la aprobación de los planes fiscales para el lunes, pero canceló súbitamente la reunión.
El portavoz de la junta, José Luis Cedeño, dijo que el organismo no comentará por el momento sobre el anuncio de Rosselló.
La junta propone otros cambios, incluido el reducir el monto a disposición de los 78 municipios puertorriqueños para recuperarse del huracán María, que azotó la isla hace seis meses y causó daños calculados en más de 100.000 millones de dólares. Se suponía que un fondo de recuperación municipal iba a recibir 100 millones de dólares anuales, pero la junta determinó que reciba una infusión de 78 millones de dólares sólo este año.
La junta indicó también que el préstamo de 300 millones de dólares otorgado a la empresa de electricidad debe ser reembolsado en dos años.
Sin esos cambios, según la junta, Puerto Rico enfrenta más aumentos en la pobreza y la pérdida de población. Casi medio millón de personas emigraron al territorio continental de Estados Unidos durante la década pasada, mientras la isla sigue sumida en una recesión de 11 años y trata de reestructurar su deuda pública superior a 70.000 millones de dólares. Otras 130.000 personas se fueron tras el paso del huracán el 20 de septiembre.
"Ahora tenemos la oportunidad, con el apoyo del gobierno federal y el estímulo de los fondos federales, de iniciar una recuperación verdaderamente sostenible, corregir los terribles errores fiscales del pasado y beneficiar la vida de todos los que habitan la isla", afirmó la junta en una de sus cartas.