Argentina inicia debate formal para despenalizar el aborto
BUENOS AIRES (AP) Con el grito de fondo ¡Aborto legal en el hospital! de varios cientos de activistas apostadas frente al Congreso, diputados argentinos iniciaron el martes la discusión formal de un proyecto de ley para despenalizar el aborto, el cual promete un arduo y acalorado debate en los próximos meses con final incierto.
El proyecto que garantiza el derecho de toda mujer a interrumpir voluntariamente un embarazo durante las primeras 14 semanas de gestación comenzó a tratarse en una reunión conjunta de los miembros de las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Familia y Salud de la Cámara de Diputados. Allí los legisladores acordaron un cronograma de audiencias que los impulsores de la iniciativa esperan derive en la firma de un dictamen de mayoría para habilitar la votación en el recinto.
Este es el séptimo proyecto de despenalización del aborto que se discute en el Congreso en la última década. Ninguno de los anteriores prosperó, en parte a causa del poder de presión de la Iglesia Católica, liderada desde 2013 por el Papa Francisco de origen argentino.
Esta vez, sin embargo, se presenta un escenario más propicio. La despenalización del aborto es un pilar del movimiento feminista que ha protagonizado multitudinarias manifestaciones en los últimos tres años en Argentina contra la violencia machista. En este contexto, el presidente Mauricio Macri, que no apoya el aborto, instó días atrás a los legisladores de su espacio a debatir libremente su legalización.
Fuera del Parlamento, activistas con los pañuelos verdes que identifican a la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto legal, Seguro y Gratuito destacaron que se está ante un momento histórico e instaron a los legisladores a saldar lo que ellas consideran una deuda de la democracia.
El aborto clandestino es una forma de femicidio a manos del Estado, advirtió una integrante de ese movimiento desde un improvisado escenario frente al Congreso. Allí prevalecían consignas como son nuestras vidas, es nuestra decisión. Aborto libre, seguro y gratuito; Aborto legal. Separación del Estado de la Iglesia y Queremos aborto legal ya, las pibas (jóvenes) no resucitan al tercer día, en respuesta a una iniciativa de una de las líderes del oficialismo que había pedido suspender la discusión del proyecto hasta después de Semana Santa.
Es un momento histórico para todos los involucrados en esta lucha. Y si no avanza, vamos a seguir en las calles, señaló Yamila Quiroga, estudiante de psicología de 23 años. De una vez por todas aborto legal, esta es una causa de la salud pública. No podemos desentendernos de lo que está pasando, siempre son las pobres las que se mueren.
Según un informe de 2016 del Ministerio de Salud, se realizan en el país entre 370.000 y 522.000 abortos por años, cifras estimativas por tratarse de una práctica clandestina.
La Campaña Nacional por el derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito sostiene que 49.000 mujeres son hospitalizadas al año por complicaciones relacionadas con prácticas abortivas inseguras y las más afectadas son las de origen humilde.
En la actualidad, la legislación argentina permite el aborto en casos de violación o peligro para la vida o la salud de la mujer gestante. No obstante, según agrupaciones pro abortistas, muchos hospitales públicos no realizan la práctica en los casos no penados por la ley.
Una encuesta encargada por Amnistía Internacional indicó que el 59% de los argentinos están de acuerdo con despenalizar el aborto.
El proyecto, con el respaldo de 71 diputados de distintas fuerzas políticas, establece que previo a la realización del aborto se requerirá sólo un consentimiento por escrito de la mujer. A su vez incorpora esta práctica como prestación médica básica de los servicios de salud tanto públicos como privados. Será obligación de los médicos cumplir con la práctica del aborto sin ninguna autorización judicial previa. Agrega que la interrupción del embarazo puede realizarse mediante técnicas farmacológicas o de técnicas instrumentales o quirúrgicas.
Se estima que su discusión en comisiones demandará al menos dos meses. En caso de llegar al recinto de Diputados no está claro aún si la iniciativa cuenta con suficientes votos a favor para su media sanción, lo que le permitiría llegar al Senado.
Puerto Rico, Cuba, Uruguay y Guyana son los únicos países de América Latina donde el aborto está permitido, en una lista que también incluye a la Ciudad de México. En tanto que Honduras, Nicaragua, República Dominicana y El Salvador son los únicos países de la región que los que la práctica está completamente penada.