El presidente Putin hace campaña con obreros en Rusia
NIZHNY TAGIL, Rusia (AP) El presidente ruso Vladimir Putin llevó el martes su campaña a una de las principales compañías industriales de Rusia, donde prometió impulsar al sector tecnológico y mejorar los estándares de vida.
El mandatario viajó a la localidad de Nizhny Tagil en los montes Urales para visitar Uralvagonzavod, una enorme fábrica donde se producen tanques para el ejército ruso y vagones de tren. El viaje fue organizado mientras el líder ruso busca apuntalar su base de seguidores antes de las elecciones del 18 de marzo.
La planta de Uralvagonzavod fue emblemática en la campaña de Putin en 2012, cuando dependió fuertemente de los obreros mientras en Moscú había enormes marchas contra su gobierno.
En aquellos años, Putin calificó a los manifestantes urbanos de clase media como secuaces de Occidente, parte de una élite enfrentada con la mayoría en el país.
En un feroz discurso que puso en evidencia la divisoria campaña de hace seis años, un capataz en Uralvagonzavod ofreció a Putin encabezar a sus trabajadores hasta Moscú para plantar la cara a los críticos del Kremlin y ayudar a defender la estabilidad de la nación.
Esta polarización no se ve ahora.
Con Putin teniendo índices de aprobación del 80%, está teniendo una campaña tranquila, posando como un confiado padre de la nación. Busca atraer a diferentes grupos de votantes, prometiendo una recuperación económica, mayores salarios y pensiones, mejor atención médica y educativa y más infraestructura moderna.
"Necesitamos elevar los estándares de vida y reducir el número de personas que viven por debajo de la línea de pobreza", dijo el mandatario a los trabajadores de la planta el martes.
La economía rusa apenas comenzó a salir el año pasado de una recesión de dos años causada por un doble golpe: una caída en los precios mundiales del petróleo y sanciones occidentales derivadas de la crisis entre Rusia y Ucrania.
La fábrica de Uralvagonzavod también se ha visto afectada por la crisis y hasta hace poco se encontraba a punto de quebrar. Aunque la demanda por sus tanques sigue fuerte en plena modernización militar rusa, los pedidos de vagones han disminuido.
Algunos obreros en esta planta están disgustados por una caída en los salarios e incluso algunos demandaron a la gerencia.
Sin embargo, no se veía a nadie descontento durante la visita de Putin a la planta el martes, donde el presidente dijo que la fábrica era "legendaria" y le aplaudieron varias veces.
Los trabajadores hicieron preguntas relacionadas con el futuro de las industrias pesadas y la capacitación profesional. Putin ofreció amplias oportunidades en este aspecto.