Investigarán en Puerto Rico cálculo de muertes por huracán
SAN JUAN (AP) Expertos de la Universidad George Washington encabezarán una investigación independiente y profunda sobre el cálculo de las muertes en Puerto Rico tras el impacto del huracán María, anunció el jueves el gobernador de la isla en medio de acusaciones de que las autoridades locales dieron un conteo menor al verdadero.
El equipo, encabezado por la decana y un epidemiólogo de la Facultad de Salud Pública de la universidad, espera tener un informe preliminar en unos tres meses y uno final en un año.
"Diremos las cosas tal como las vemos, eso les prometo", dijo la decana Lynn Goldman.
Funcionarios del gobierno de Ricardo Rosselló habían afirmado que 64 personas murieron como resultado del huracán categoría 4 que azotó la isla el 20 de septiembre con vientos de hasta 248 kilómetros por hora (154 millas por hora).
Pero los críticos han dicho que la cifra de fallecimientos es mucho más elevada, e hicieron notar que un incremento en el número de muertes tras el paso de la tormenta no era normal. Puerto Rico registró un promedio oficial de aproximadamente 82 fallecimientos diarios en las dos semanas previas al embate de María. La cifra aumentó a 117 al día después de que la tormenta azotó la isla a mediados de septiembre, y luego cayó por debajo de lo usual en octubre.
Rosselló dijo que su gobierno desea apoyarse en la tecnología más avanzada para determinar con toda claridad la cifra de víctimas, ya que desea saber la verdad.
Goldman dijo que su equipo revisará todos los decesos desde septiembre hasta fines de febrero, con base en los certificados de defunción, visitas a hospitales y funerarias, y en entrevistas con familiares y médicos. El equipo también revisará las estadísticas de mortandad de los últimos 10 años con el fin de calcular los posibles excesos en el registro de fallecimientos, y analizará el proceso que utilizó Puerto Rico para contar a las víctimas. Expresó esperanzas de que el tipo de estudio que su equipo realizará pueda derivar en un modelo estadounidense mejorado para futuros escrutinios de fatalidades tras desastres naturales.
En todo el mundo, estos métodos no están lo suficientemente desarrollados, señaló, y agregó que trabajará junto a las autoridades puertorriqueñas. A pesar de los mejores esfuerzos de mucha gente para atender a las personas luego de este desastre... no siempre ha sido posible que los registros sean llevados en la forma en que suelen llevarse.
Voceros del gobierno han rechazado las versiones de prensa de que cientos de personas murieron como consecuencia directa de la tormenta, pero a fines de diciembre Rosselló ordenó una revisión. La cifra actual incluye a algunas que murieron de infartos al corazón, suicidio o falla respiratoria, pero un informe de otros investigadores _entre ellos el director de demografía aplicada en la Universidad del Estado de Pensilvania_ calcula que casi 500 de los fallecimientos en Puerto Rico durante septiembre fueron contabilizados en exceso.
Los parientes de las víctimas hacen notar que la tormenta dejó a la isla de 3,3 millones de habitantes sin electricidad, incluidos los que estaban en hospitales y asilos de ancianos que estaban conectados a respiradores y otro equipo eléctrico.
La primera fase de la pesquisa le costará al gobierno unos 305.000 dólares, dijeron funcionarios, y añadieron que la segunda podría costar hasta 1,1 millones y sería pagada por medio de subvenciones, dado que la isla se encuentra agobiada por una recesión de 11 años y pasa apuros para reestructurar una deuda pública de 73.000 millones de dólares.
El epidemiólogo Carlos Santos advirtió que el equipo posiblemente no tendrá una cifra exacta al concluir su labor, y que la investigación será difícil dada la cantidad de tiempo que ha transcurrido.
"El desafío es averiguar exactamente cómo sucedieron los hechos", expresó Santos. "Estamos asumiendo un proyecto cuando ya han pasado varios meses".
Santos añadió que el equipo también tomará en cuenta los fallecimientos ocurridos fuera de Puerto Rico, al considerar que decenas de miles de puertorriqueños huyeron a Estados Unidos tras el paso del huracán y posiblemente algunos fallecieron allí.