Polémica por eutanasia en Bélgica agita a los médicos
Un caso polémico de eutanasia en Bélgica, en torno a la muerte de un enfermo de demencia que no solicitó formalmente morir, vuelve a despertar inquietudes sobre la falta de supervisión en el país con algunas de las leyes de eutanasia más liberales del mundo.
El caso está descrito en una carta a la que tuvo acceso The Associated Press, escrita por un médico que renunció a la comisión de eutanasia en protesta por éste y otros casos.
Algunos especialistas dicen que el caso tal como está descrito en la carta equivale a un asesinato. El enfermo carecía de la capacidad mental para solicitar la eutanasia, y el pedido provino de sus familiares. Los presidentes de la comisión dicen que el médico se equivocó al informar de la muerte como un caso de eutanasia.
Aunque la eutanasia en Bélgica es legal desde 2002 y tiene el apoyo de una mayoría abrumadora, sus detractores han expresado inquietud acerca de ciertas prácticas y de la rapidez con que algunos médicos aprueban los pedidos de morir de enfermos mentales.
La AP reveló el año pasado la desavenencia entre el doctor Willem Distelmans, copresidente de la comisión de eutanasia, y la doctora Lieve Thienpont, partidaria de la eutanasia para los enfermos mentales. Distelmans insinuó que algunos pacientes de Thienpont habrían sido muertos sin que se cumplieran todos los requisitos legales. Ante el informe de la AP, más de 360 médicos, académicos y otros firmaron un petitorio para reclamar un mayor control de la eutanasia para enfermos mentales.
La eutanasia _el pedido del paciente de ser muerto por un médico_ se puede otorgar en Bélgica a enfermos físicos o mentales. No es necesario que la enfermedad sea fatal, sino que ocasione un sufrimiento insoportable e intratable. Los criterios para otorgarla incluyen el pedido voluntario, bien ponderado y reiterado de la persona.
Pero la comisión de eutanasia viola habitualmente la ley, según la carta de renuncia del neurólogo Ludo Vanopdenbosch, a los dirigentes partidarios del legislativo belga que designan a los miembros.
El caso más notable fue a principios de septiembre, dijo Vanopdenbosch, cuando se discutió el caso de un enfermo de demencia grave combinada con Parkinson.
El enfermo, cuya identidad no fue divulgada, fue muerto por pedido de la familia, según la carta de Vanopdenbosch. No está registrado pedido alguno de eutanasia del propio enfermo.
Después de horas de debate, la comisión resolvió no referir el caso al procurador para determinar si correspondía iniciar una demanda penal.
Vanopdenbosch confirmó la autenticidad de la carta, pero se negó a entrar en detalles del caso.