EEUU culpa a compañía puertorriqueña por lenta recuperación
SAN JUAN (AP) Las autoridades federales estadounidenses declararon el jueves que la falta de liderazgo, la escasez de recursos y una deficiente comunicación en Puerto Rico han entorpecido las labores de reconstrucción tras el impacto del huracán María.
La subadministradora regional de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), Ahsha Tribble, dijo que la burocracia en la isla y la incapacidad de la compañía de electricidad para pagar los suministros que ordenó después del paso del meteoro hicieron más lentos los esfuerzos por restablecer la electricidad. Casi medio millón de habitantes siguen sin energía eléctrica más de cuatro meses después del impacto de la tormenta categoría 4, la cual destruyó dos tercios del sistema de distribución de luz, provocó decenas de muertes y causó daños estimados en 94.000 millones de dólares.
Tribble dijo que fue extremadamente difícil trabajar con la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico para averiguar qué se necesitaba después de la tormenta para reconstruir el sistema. Añadió que las dificultades financieras de la entidad socavaron la confianza entre los proveedores de la FEMA, y que la designación de un director interino de la compañía eléctrica en medio del desastre dificultó el trato con la dirección. Aparte de eso, recalcó, la comunicación era tensa.
"En una emergencia, cuando uno tiene que pasar por ocho niveles de autorización para hacer algo, eso no funciona para nosotros, expresó la funcionaria. "Si se juntan todas esas cosas, es la receta para un desastre".
Tribble fue una de varios funcionarios que hablaron ante una junta federal que supervisa las finanzas de la isla y que está sopesando la posibilidad de privatizar la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico, cuya deuda asciende a 9.000 millones de dólares. Sería la mayor reestructuración de una entidad pública en la historia estadounidense.
Expertos en energía le dijeron a la junta de supervisión que la falta de mantenimiento, los cables sobrecargados y las deficientes labores de reparación efectuadas por la empresa eléctrica puertorriqueña a lo largo de los años contribuyeron a la amplia falla de la red después de la tormenta.
Sanjay Bose, funcionario de la empresa eléctrica estadounidense ConEdison que ayudó en las labores de reconstrucción tras el huracán, dijo que su personal en Puerto Rico halló numerosos problemas, entre ellos postes de luz instalados a menor profundidad que el estándar de la industria.
"No puedo señalar que una sola causa haya generado todo el problema, aseveró Bose. El mantenimiento habría prevenido parte de los daños.
Geraldo Quiñones, vocero de la empresa puertorriqueña, refirió cualquier pregunta a la autoridad financiera de la isla, cuyo portavoz no respondió.
El coronel Donovan Ollar del Cuerpo de Ingenieros del Ejército le dijo a la junta supervisora que se ha restablecido sólo el 61% del sistema de transmisiones de la compañía. También es un problema que parte de la infraestructura eléctrica de Puerto Rico es única para la isla y las empresas en Estados Unidos ya no fabrican refacciones. Además, la red puertorriqueña usa entre 200 y 300 tipos de transformadores distintos, cuando el estándar para la industria es de sólo tres o cuatro, expresó.
Ollar dijo también que las reparaciones improvisadas hechas por la empresa eléctrica antes del huracán les dificultaron las labores a sus empleados.
Hace que sea problemático regresar y reparar las cosas correctamente, dijo, y añadió que desea reestructurar todo el sistema para que se acople a los estándares estadounidenses, de tal manera que cuando una empresa entre a la isla pueda usar los mismos equipos.
Las autoridades resaltaron que Puerto Rico no activó un acuerdo de ayuda mutua con Estados Unidos continental hasta el 31 de octubre, más de cuatro meses después del paso del huracán. En tanto, poco después de la tormenta, el exdirector de la Autoridad de Energía Eléctrica firmó un contrato por 300 millones de dólares con una pequeña compañía de Montana de nombre Whitefish Holdings Inc. para que ayudara con los esfuerzos de restauración del servicio. Desde entonces, el director renunció a su cargo y el contrato fue cancelado.
Tribble defendió dicho pacto, al indicar que las compañías eléctricas estadounidenses cubiertas por el acuerdo no eran capaces de reparar el sistema de transmisión debido a lo extenso de los daños.
Es por eso que son necesarias las compañías como Whitefish y Cobra, dijo, en referencia a otra empresa contratada para ayudar a restaurar la electricidad.
Sin embargo, Tribble añadió que deben mejorarse los esfuerzos de reconstrucción tras un huracán.
Seguimos aprendiendo lo que debe hacerse, declaró. Necesitamos hacerlo mejor.