Papa defiende a obispo chileno acusado de encubrir abusos
SANTIAGO DE CHILE (AP) El papa Francisco volvió a desatar la ira de algunas víctimas de los abusos sexuales de un sacerdote en Chile, al calificar el jueves como calumnias los señalamientos de que un obispo chileno estaba enterado y encubrió a Fernando Karadima, considerado el mayor religioso pederasta en la nación andina.
La defensa que ante la prensa realizó el pontífice argentino del obispo de la diócesis sureña de Osorno, Juan Barros, tiene lugar dos días después de que Francisco pidiera perdón por los escándalos derivados de abusos contra menores que se atribuyen a Karadima.
Francisco tocó el tema en la jornada de cierre de su visita a Chile, después de lo cual seguirá hacia Perú, la segunda escala de su viaje pastoral.
Tras lo ocurrido, Juan Carlos Cruz, una de las víctimas de Karadima, escribió en Twitter: cómo si uno hubiese podido sacarse una selfie o foto mientras Karadima me abusaba a mi u otros con Juan Barros parado al lado viéndolo todo. Estas personas desde arriba están locos y @Pontifex_es (la cuenta del papa en la red social) habla de reparación a las víctimas.
Barros dijo el jueves a la prensa en Iquique, donde Francisco realizó su última misa en suelo chileno, que el papa fue muy cariñoso al final de la misa (del miércoles), dándome palabras de ánimo.
Las palabras específicas me las guardo en el corazón, pero fueron palabras muy lindas de apoyo, cariño... eso a uno, como hijo de la iglesia, como sacerdote y obispo, lo alegra, lo fortalece", añadió.
El papa ha sido blanco de críticas en Chile porque en 2015 designó a Barros como obispo en Osorno, en el sur del país.
Barros fue uno de los discípulos de Karadima, a quien el Vaticano encontró culpable en 2011 de abusar de menores.
En una carta de 2015 y que The Associated Press obtuvo y publicó la semana pasada, el pontífice dice que contempló pedirle la renuncia a Barros y a otros dos obispos acusados de saber de los abusos cometidos por Karadima, además de darles un año sabático. Al final, el Vaticano no avanzó en el plan.