Nacerán 48.000 bebés en los campamentos de los rohinya
DACA, Bangladesh (AP) Una organización internacional de ayuda pronostica que este año nacerán 48.000 bebés en los sobrepoblados campamentos de refugiados para los musulmanes rohinya que huyeron de Myanmar a Bangladesh.
La organización Save the Children advirtió en un informe publicado el viernes que los bebés correrán un mayor riesgo de padecer enfermedades y desnutrición, y por lo tanto morirán antes de cumplir cinco años. La mayoría de los bebés probablemente nacerán en las tiendas de campaña del campamento, indicó la agencia.
Los campamentos tienen poca higiene y son un criadero de enfermedades como la difteria, el sarampión y el cólera, a las cuales los recién nacidos son particularmente vulnerables, dijo Rachael Cummings, la asesora en materia de salud de la agencia en Coxs Bazar, la ciudad más cercana a los campamentos. Este no es un lugar adecuado para que un niño nazca, puntualizó.
Más de 600.000 rohinya, un grupo minoritario del estado de Rakhine en el oeste de Myanmar, han huido de lo que las Naciones Unidas dice es una campaña de limpieza étnica por los militares y las multitudes budistas de ese país desde fines de agosto del año pasado. Muchos viven en frágiles tiendas de campaña hechas de plástico y de bambú en campamentos y asentamientos improvisados. Casi 60% son niños, muchos de los cuales padecen enfermedades y desnutrición, según la UNICEF.
Un funcionario bangladesí calificó el pronóstico de 48.000 bebés como abrumador.
Simplemente, esto será desastroso y terrible para nosotros, dijo Priton Kumar Chowdhury, subdirector del departamento de servicios sociales del gobierno en Coxs Bazar. No puedo imaginarlo, y mi cerebro realmente no sabe cómo manejar esto.
Su departamento ha identificado a más de 36.000 huérfanos en los campamentos, añadió.
Save the Children basó su pronóstico en un estimado del número de mujeres embarazadas entre los refugiados.
Bangladesh ha estado negociando con Myanmar con el fin de implementar un protocolo para el regreso voluntario de los rohinya, pero todavía no está claro si regresarán ni cuándo lo harán, debido a la persistente preocupación por su seguridad en Myanmar.