Presidente hondureño dispuesto a aceptar recuento de votos
TEGUCIGALPA (AP) El presidente hondureño Juan Orlando Hernández declaró que está dispuesto a aceptar un recuento de los votos de las elecciones en medio de denuncias de fraude que han sumido al país en una severa crisis política.
Ocho países latinoamericanos aplaudieron más tarde la decisión, aunque sigue habiendo dudas sobre cómo de estricto será ese recuento.
Instamos a los ciudadanos hondureños a esperar de manera pacífica el recuento de los votos, indicaron los ocho países _Argentina, Chile, Colombia, Guatemala, México, Paraguay, Perú y Uruguay_ en un comunicado.
Hernández había llamado antes al martes al Tribunal Supremo Electoral a reexaminar todos los votos escrutados en las elecciones del 26 de noviembre "porque el pueblo merece respeto".
El candidato opositor Salvador Nasralla ha pedido un recuento de votos y que se repita todo el proceso electoral. Le dijo a The Associated Press que eso sería legal si el Congreso se reúne y lo aprueba.
Contados todos los votos, Hernández va ganando con 43% ante el 41,4% de Nasralla.
Ambos candidatos se han declarado victoriosos, aunque la autoridad electoral no ha declarado un triunfador definitivo a más de una semana de los comicios.
"Aún no se sabe quién es el nuevo presidente, dijo el analista político Rodolfo Cortés Calderón. Mientras, el pueblo se hunde en la debacle por sendas manifestaciones, suspensión de garantías constitucionales y marchas nocturnas de las cacerolas".
Observadores locales e internacionales del proceso electoral han denunciado diversas irregularidades, como una interrupción en el conteo que duró más de un día. Lo anterior llamó la atención porque antes Nasralla iba a la cabeza y luego las cifras cambiaron para favorecer a Hernández.
Autoridades del Tribunal Electoral han negado cualquier manipulación de los votos.
Sin embargo, el retraso e incertidumbre por el conteo han provocado que Nasralla alegue fraude y que sus simpatizantes se manifiesten en las calles. En respuesta, el gobierno declaró un toque de queda y la Organización de Estados Americanos (OEA) dijo que los primeros reportes arrojan hasta 11 fallecidos a causa de los disturbios.
"También hay asesinados por los militares, decenas de heridos, saqueos a grandes y pequeños comercios, paralización de la economía, destrucción de obras públicas y familias enfrentadas", aseguró Cortés Calderón.
Por su parte, Pedro Barquero, director ejecutivo de la cámara de comercio del país, estima que los daños derivados de las protestas a los negocios podrían ascender hasta unos 65 millones de dólares.