Expresidente Correa regresa a Ecuador con partido dividido
QUITO (AP) El expresidente Rafael Correa anunció que regresaría en las próximas horas a Ecuador, donde el otrora poderoso partido de gobierno Alianza País está virtualmente dividido entre quienes aún lo apoyan y una mayoría que se ha alineado con el actual mandatario, Lenín Moreno.
Correa había permanecido en Bélgica desde el 10 de julio junto a su esposa, Anne Malherbe, y su familia.
El exgobernante vuelve a su país en un momento crítico para su partido, ya que la división interna se evidenció una vez más la semana pasada: durante una votación en la Asamblea, quedó claro que 47 legisladores de su fuerza política apoyan a Moreno y 27 aún son leales a él.
Las diferencias entre ambos bandos llevaron a que un grupo de directivos de Alianza País destituyeran a finales de octubre a Moreno como presidente de ese partido, aunque no tenían atribuciones legales para ello. Poco después, el Tribunal Electoral ratificó al gobernante como líder de esa organización.
Tales directivos fueron sancionados con una suspensión por seis meses, pero recientemente convocaron a una convención nacional para elegir nuevas autoridades, contraviniendo nuevamente las reglas.
Correa dijo que llegaría para asistir a ese encuentro y tratar de expulsar a Moreno del partido, a quien acusó de provocar un retraso de 20 años en este país con solo seis meses de gobierno, pero éste se adelantó a la jugada y el jueves nombró una nueva directiva de Alianza País.
A pesar de haberse mudado a Europa desde mediados de año, Correa ha tenido relativa presencia en el escenario político ecuatoriano, especialmente a través de Twitter, desde donde ha criticado con dureza a Moreno, su sucesor y amigo, a quien ha acusado de ser desleal con su proyecto político y de no defender lo que considera sus logros durante su gestión desde 2007 y 2017.
El gobierno de Correa se caracterizó por una sostenida inversión, aprovechando los altos precios del petróleo, en grandes obras de infraestructura como carreteras, centrales hidroeléctricas, escuelas y hospitales públicos, aunque desde que terminó su gestión en mayo se han multiplicado las denuncias y los procesos judiciales por corrupción de quienes fueran altos funcionarios suyos.
Uno de los acusados es el exvicepresidente de Correa, Jorge Glas, que ocupa el mismo cargo en el actual gobierno. Glas permanece en prisión mientras avanza un proceso judicial en el que está acusado de asociación ilícita para delinquir, en el marco de la red de corrupción de propiciada por Odebrecht.