Puerto Rico necesita ayuda ???sin precedentes??? tras hurac?n
WASHINGTON (AP) Es tan grande la devastación provocada en Puerto Rico por el huracán María que si el gobierno y el Congreso estadounidenses no le dan más ayuda no podrá recuperarse, dijo el martes la jefa de una junta federal que supervisa las finanzas isleñas.
Natalie Jaresko, directora ejecutiva de la Junta de Supervisión y Administración Financiera para Puerto Rico, dijo al Congreso que el territorio estadounidense requiere fondos de emergencia en una escala sin precedentes para restaurar viviendas, agua corriente y energía eléctrica.
Aunque las condiciones han mejorado desde la tormenta del 20 de septiembre, casi el 60% de la isla carece de electricidad, miles de personas están alojadas en refugios y decenas de miles de viviendas no tienen techo, dijo Jaresko. La instalación de techos temporales de lona tomará meses, añadió.
Sin niveles de ayuda sin precedentes del gobierno de Estados Unidos, la recuperación que planeamos fracasará, dijo Jaresko. La junta federal estima que necesitará hasta 21.000 millones de dólares durante los próximos dos años para garantizar la provisión de las funciones básicas de gobierno, incluidos policías, bomberos, maestros y otros empleados públicos, dijo Jaresko.
Las autoridades puertorriqueñas estiman que la isla sufrió daños por valor de 45.000 a 95.000 millones de dólares, ya que la tormenta prácticamente destruyó la red eléctrica y otra infraestructura. Hasta ahora el Congreso ha aprobado casi 5.000 millones de dólares en ayuda.
El representante republicano Rob Bishop, presidente de la Comisión de Recursos Naturales de la cámara baja, dijo estar decepcionado de que el titular de la empresa de energía de Puerto Rico no se presentara a declarar el martes, como estaba previsto. Ricardo Ramos, director ejecutivo de la Autoridad de Energía Eléctrica puertorriqueña, debía responder a preguntas sobre la cancelación de un contrato de 300 millones de dólares otorgado a una pequeña empresa de energía de Montana con sede en el pueblo natal del secretario del Interior, Ryan Zinke.
Aunque tenía apenas dos empleados cuando el huracán pasó, Whitefish Energy Holdings fue elegida para ayudar a reconstruir el sistema eléctrico de la isla. Ramos canceló el contrato el 29 de octubre entre críticas de legisladores y a solicitud del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló.
El presidente de la junta de gobierno de la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico, Ernesto Sgroi, dijo en una carta a la comisión que la presencia de Ramos era necesaria allí.
Que deje la isla durante tres días y se le obligue a ir a Washington, D.C. sin lugar a dudas entorpecería nuestros esfuerzos de restauración, dijo Sgroi en la misiva.
Bishop dijo que era desafortunado que Ramos se echara para atrás y no acudiera a la audiencia, pero prometió que los legisladores buscarán respuestas sobre el contrato con Whitefish. El acuerdo incluye varios elementos extraños como elevados pagos por hora para los conductores de camiones y otros trabajadores, y una cláusula que prohíbe la revisión del costo laboral, comentó Bishop.
Whitefish permanece en Puerto Rico y se prevé que continúe sus labores durante todo noviembre. Ahora cuenta con 446 empleados en la isla, informó la compañía, la mayoría de ellos subcontratados.
La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, quien ha criticado el contrato con Whitefish y la respuesta del gobierno de Donald Trump a la tormenta, también se negó a presentarse a declarar.
Bishop, que visitó la isla el mes pasado, dijo que la restauración de la red eléctrica es de máxima importancia para resolver las necesidades inmediatas de Puerto Rico.
Noel Zamot, coronel retirado de la Fuerza Aérea que fue designado para supervisar la restauración de energía eléctrica, dijo que no tiene un estimado de cuándo se completarán las obras, aunque otros funcionarios han dicho que el servicio no se restaurará por completo sino hasta el próximo año.
Antes del azote de la tormenta, la empresa de energía eléctrica se había declarado en bancarrota, y Bishop dijo que los problemas de la isla se han agravado debido al largo historial de malas administraciones, mantenimiento inadecuado y el amiguismo crónico.
El objetivo de la audiencia del martes no era repartir culpas, intimidar o jugar a la política, comentó Bishop. El objetivo no es avergonzar sin razón. El objetivo es solucionar problemas y ayudar a la gente.
El representante republicano Raul Labrador defendió la respuesta del gobierno de Trump y dijo que la severidad de la tormenta ha dificultado la recuperación.
Desde el paso del huracán, más de 100.000 puertorriqueños han abandonado la isla, y la mayoría de ellos se han establecido en estados como Florida, Nueva York, Pensilvania y Ohio.