Temer promete reformas en Brasil, ¿podrá cumplir?
BRASILIA (AP) El gobierno del presidente Michel Temer volvió su atención a sus planes de reformas el jueves, pero no estaba claro si el gobierno tenía apoyo suficiente para realizarlos desde que apenas una pequeña mayoría votó por no suspenderlo y enviarlo a juicio por corrupción.
La votación del miércoles por la noche fue apenas la más reciente de una serie de amenazas a la supervivencia política de Temer: en lo que va del año ha vencido un cuestionamiento a su elección como vicepresidente, resistido los reclamos de que renuncie ante las denuncias de corrupción y derrotado dos intentos de destituirlo por cobrar sobornos. Temer ha dicho que las denuncias de corrupción son absurdas y obedecen a motivaciones políticas.
Ahora que las amenazas evidentes han quedado atrás, Temer y sus asesores parecen ávidos de volver a los asuntos de gobierno.
Es hora de concentrarnos en los intereses de nuestro pueblo. El puente que estamos construyendo hacia el futuro es sólido, firme y resistente, dijo Temer en un video publicado en redes sociales. Destacó el crecimiento económico incipiente, las primeras señales de creación de empleos y la caída de la inflación. Su jefe de gabinete, Eliseu Padilha, dijo que se pretende aprobar una reforma del seguro social este año.
Pero al gastar tanto capital político en su supervivencia, los analistas se preguntan si le queda algo para aprobar una reforma del sistema de pensiones o aprobar leyes laborales para revivir la economía, la más grande de América Latina.
Aunque las aplauden muchos inversores, las reformas son profundamente impopulares, como lo es el propio Temer. Su tasa de aprobación es del 3%, la más baja de cualquier mandatario en el mundo, de acuerdo con un sondeo reciente del grupo Eurasia, y no solo por causa de los escándalos. La decisión de Temer la semana pasada de ofrecer grandes descuentos en multas por infracciones ambientales provocó indignación, así como la flexibilización de las normas que combaten los abusos laborales.
Temer siempre prometió que utilizaría sus conocidas aptitudes de negociador para modernizar la economía y sacar al país más grande de Latinoamérica de la recesión más profunda en varias décadas. Muchos legisladores que apoyaron a Temer el miércoles dijeron que lo hacían para sustentar la recuperación económica incipiente.
Pero el columnista Helio Gurovitz, del gigante mediático Globo, dijo que podría suceder lo contrario.
El problema es que la permanencia de Temer también ofrece riesgos para la economía, escribió. El principal de ellos es la amenaza a la agenda de reformas, en particular el seguro social. Temer salió de la votación de ayer con una base parlamentaria aún más frágil.
Los inversores parecían experimentar cierto alivio, la moneda se mantenía estable frente al dólar y el índice bursátil Bovespa abrió en alza.
Pero los analistas advirtieron que el respiro podría ser efímero.
Los mercados que aplaudieron la salida a escena de Temer tal vez festejaron prematuramente porque me parece que el reformismo ha salido manchado de su asociación con Temer, dijo el profesor Matthew M. Taylor, de la American University.