Entrenador de Miami cree ser uno de los investigados
CORAL GABLES, Florida, EE.UU. (AP) Jim Larrañaga, entrenador de la Universidad de Miami, cree ser el tercer entrenador mencionado en documentos de una corte, que dan detalles de una investigación sobre el basquetbol colegial.
Pero el estratega confió en que saldrá reivindicado al final.
No hice nada malo, señaló.
Larrañaga habló el lunes en público por primera vez desde que estalló el escándalo. Leyó un comunicado y luego se negó a responder preguntas sobre la investigación o las personas relacionadas con ésta. El nombre de Larrañaga no aparece en los documentos de la corte, aunque se menciona a un tercer entrenador que presuntamente sostuvo conversaciones con un ejecutivo de Adidas acerca de la posibilidad de pagar 150.000 dólares a un jugador reclutado a cambio de ciertos compromisos.
El departamento deportivo de Miami tiene un convenio de patrocinio de 12 años con Adidas, por más de 100 millones de dólares en efectivo y equipamiento para los Hurricanes.
Con base en lo que sabemos por ahora, mi equipo legal considera que yo soy el tercer entrenador, como se menciona en la querella original de septiembre, aunque ello no ha sido confirmado por la fiscalía federal, comentó Larrañaga. Y estoy agradecido por haber llegado a esa conclusión... Es reconfortante saber que ninguno de mis asistentes es involucrado en modo alguno.
Larrañaga dijo que ha hablado con agentes del FBI, ha entregado miles de mensajes de teléfono celular, correos electrónicos y otros documentos. La pesquisa federal prosigue, así como una encabezada por directivos de la universidad.
Mi reputación como hombre y entrenador saldrá intacta, confió Larrañaga.
El caso trascendió el mes pasado, cuando fiscales federales dijeron que 10 hombres, incluidos cuatro entrenadores asistentes en programas deportivos de universidades destacadas, fueron acusados de emplear cientos de miles de dólares en sobornos para influir en las decisiones de los basquetbolistas sobre en qué escuela estudiaban, qué marca de zapatos elegían y a qué agentes contrataban.
Ello ha llevado al despido del entrenador de Louisville, Rick Pitino, y del director atlético Tom Jurich.