AP VERIFICA: Trump ofrece una lectura cuestionable de Irán
WASHINGTON (AP) El presidente de Estados Unidos, ofreció una interpretación cuestionable sobre la situación económica iraní cuando acusó al gobierno de Obama de levantar las sanciones justo cuando el gobierno iraní enfrentaba un colapso total.
A continuación, un vistazo a algunos de sus comentarios en una comparecencia el viernes en la que condenó el comportamiento de Irán pero no llegó a cumplir su promesa de campaña de sacar a Estados Unidos del acuerdo multinacional que suavizó las sanciones sobre Teherán a cambio de límites en su programa nuclear.
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TRUMP: El gobierno anterior levantó estas sanciones, justo antes de lo que habría sido el colapso total del régimen iraní.
LOS HECHOS: Un colapso inminente de la economía iraní era muy improbable, de acuerdo con economistas internacionales y funcionarios estadounidenses.
Las sanciones internacionales sobre Irán en respuesta a su programa nuclear sí provocaron una crisis en su economía al inicio de esta década. Pero antes incluso del acuerdo nuclear, Irán hizo recortes en su presupuesto y equilibró su balanza de pagos. El país seguía exportando petróleo e importando productos de países como Japón y China.
El acuerdo multinacional congeló el programa nuclear iraní a cambio de una serie de sanciones sobre el petróleo, el comercio y las finanzas iraníes. Irán también recuperó el acceso a activos congelados en el extranjero. Podría interpretarse el acuerdo como un salvavidas económico para el país, pero ni economistas extranjeros ni funcionarios estadounidenses preveían en su momento un colapso inminente de la economía iraní.
Uno de esos expertos, Patrick Clawson, del Washington Institute for Near East Policy, dijo que los gobernantes iraníes estaban preocupados en esa época por la posibilidad de inestabilidad social, pero la economía era sostenible.
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TRUMP: "El régimen iraní ha cometido varias violaciones al acuerdo. Por ejemplo, en dos ocasiones distintas han superado el límite de 130 toneladas métricas de agua pesada.
LOS HECHOS: Irán ha cumplido todas sus obligaciones del acuerdo, según investigadores del Organismo Internacional de la Energía Atómica, que señaló algunas infracciones menores que fueron corregidas con rapidez.
Trump tiene razón en que Irán superó en dos ocasiones el límite de agua pesada en su poder. Las dos veces, los inspectores internacionales pudieron ver que Irán hizo arreglos para sacar ese sobrante del país y volver a cumplir los términos.
Los partidarios del acuerdo alegan que esto demuestra que el pacto funciona. Las voces críticas dicen que como Irán vende la cantidad que le sobra en el mercado abierto, se está beneficiando de incumplir el acuerdo.
Trump y otros críticos señalan en particular a que Teherán sigue haciendo pruebas de misiles, lo que podría desafiar o no la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que consagró el acuerdo. Pero esas pruebas no incumplen el acuerdo en sí.
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TRUMP sobre el acuerdo: También dio al régimen un impulso financiero inmediato y unos 100.000 millones de dólares que su gobierno podría utilizar para financiar el terrorismo. El régimen también recibió una enorme remesa de efectivo de 1.700 millones de dólares de Estados Unidos, de los que una gran parte se cargaron físicamente en un avión y se enviaron a Irán.
LOS HECHOS: El impulso financiero se debía a dinero que era de Irán desde un principio. No fue un pago de Estados Unidos ni de otros, sino activos iraníes en el extranjero que se desbloquearon.
Los 1.700 millones de dólares de Estados Unidos son un asunto aparte. Ese proceso se remonta a la década de 1970, cuando Irán pagó a Estados Unidos 400 millones de dólares por equipamiento militar que nunca se entregó porque el gobierno fue derrocado y las relaciones diplomáticas se rompieron.
Esa ruptura dejó a personas, empresas y gobiernos en ambos países endeudados con socios en el otro bando, y dirimir esas complejas reclamaciones en tribunales y procesos de arbitraje llevó décadas. Por su parte, Irán pagó más de 2.500 millones de dólares en acuerdos con empresas y ciudadanos estadounidenses.
Al día siguiente de que se aplicara el acuerdo nuclear, Washington y Teherán anunciaron que habían resuelto las reclamaciones en torno al pedido de equipamiento militar, y Estados Unidos había acordado pagar los 400 millones de dólares iniciales junto con 1.300 millones de dólares en intereses.
