Canciller español: Referendo es ???una burla a la democracia???
MADRID (AP) El ministro de Asuntos Exteriores de España dijo el sábado que el plan del gobierno regional catalán de realizar un referendo por la independencia es una burla a la democracia.
En entrevista con the Associated Press, el ministro Alfonso Dastis acusó al gobierno catalán de tratar de promover un sistema de exclusión contrario a los objetivos e ideales que intenta promover la Unión Europea.
Lejos de ser propios de la democracia, los referendos son los instrumentos preferidos de los dictadores, sostuvo Dastis.
El gobierno español sostiene que el referendo es anticonstitucional, y la Corte Constitucional lo suspendió para estudiar el asunto. Las autoridades catalanas dicen que realizarán los comicios de todas maneras.
Lo que impulsan no es la democracia. Es una burla a la democracia, una parodia de la democracia, dijo Dastis. El pueblo catalán, que es parte de España, no puede decidir por sí solo para todo el país; una parte no puede decidir sobre el todo.
Defendió la decisión del gobierno central de enviar miles de efectivos policiales a Cataluña para impedir la votación.
Se justifica totalmente, dijo, y recordó cómo el presidente estadounidense John F. Kennedy utilizó el brazo largo de la ley para detener la segregación racial.
Si se producen disturbios el domingo, evidentemente será por parte de los que fomentan el referendo, dijo el canciller.
Añadió que los grupos antisistema como el partido CUP que apoya al gobierno catalán adoptan actitudes similares a los nazis al señalar a la gente que se opone al referendo y alentar a otros a que los acosen.
En concreto, comparó las acciones del CUP de colocar carteles con las caras de los alcaldes que no apoyan el referendo y alentar a la gente a señalarlos y acosarlos con los nazis al usar carteles para señalar las casas de los judíos.
Dastis también criticó el uso de niños para ocupar las escuelas para que sirvan como lugares de votación. Padres y alumnos las ocupaban para impedir los intentos de la policía de desarmar el lugar de votación.