Autoridades Colombia y Venezuela coordinan seguridad
Autoridades de Colombia y Venezuela coordinan seguridad para partido entre las selecciones de ambos países
En el aspecto futbolístico, el partido del jueves entre Venezuela y Colombia enfrenta a una selección que no tiene ya aspiraciones de clasificarse al Mundial y que se concentra en el largo plazo, contra otra que se ubica en el segundo puesto e intenta dar un paso firme hacia Rusia 2018.
Pero en el plano de seguridad, el encuentro ha requerido de colaboración entre dos países vecinos cuya relación ha atravesado por fricciones recientes. La sede será una ciudad de Venezuela, muy cercana a una frontera en la que se ha restringido el tránsito en diversos momentos de la historia reciente.
Las autoridades de Colombia afirmaron el martes que sus pares de Venezuela les han garantizado que habrá seguridad para la selección. Departamentos policiales de ambos países y un representante de la FIFA sostuvieron en la jornada una reunión a fin de coordinar los detalles para neutralizar eventuales problemas.
La selección colombiana volará de Barranquilla a Cúcuta, en la frontera con Venezuela, y cruzará la línea limítrofe para recorrer después 57 kilómetros hasta San Cristóbal, la ciudad donde se realizará el partido. Regresará con el mismo itinerario.
"Hay una efectiva coordinación entre las autoridades de Colombia y Venezuela... Queremos garantizar la seguridad para todos, para que se disfrute de un partido ameno y pacífico, que integre a los dos países", manifestó el martes tras la reunión el general Gustavo Moreno, comandante de la región No. 5 de la policía colombiana. "Se logró una coordinación efectiva con las autoridades y la Federación de fútbol de Venezolana y el representante de la FIFA".
La frontera del lado colombiano será reforzada con 300 policías y permanecerá abierta 24 horas a partir del miércoles, a fin de permitir el retorno de jugadores, dirigentes e hinchas de la selección cafetera.
En agosto del 2015 el presidente venezolano Nicolás Maduro cerró por casi un año la frontera con Colombia, de unos 2.200 kilómetros, a raíz de un ataque contra tres militares y un civil. A finales de 2016, el mandatario ordenó otro cierre, a fin de combatir el contrabando de papel moneda.
Y el partido en Venezuela se realiza en momentos en que persiste dentro del país la crisis económica y política. Desde marzo, una serie de protestas antigubernamentales que se extendieron por cuatro meses dejaron al menos 123 muertos, casi 2.000 heridos y unos 1.000 detenidos.
En un comunicado, la Federación Venezolana de Fútbol informó que 2.500 efectivos de la policía nacional y del estado de Táchira resguardarán la seguridad durante el encuentro.
"Los visitantes del vecino país, la selección cafetera, autoridades deportivas de la Federación Colombiana de Fútbol y los hinchas contarán con caravanas de seguridad garantizando un recorrido sin inconvenientes hasta San Cristóbal", indicó.
Se calcula que unos 15.000 colombianos acompañarán a la selección. El conjunto de José Pekerman regresará el mismo jueves por la noche para alistarse con miras al encuentro ante Brasil, el 5 de septiembre.
"Las autoridades de Venezuela han sido muy diligentes, muy colaboradoras en todo lo que se les ha solicitado nos han dicho que sí", manifestó el presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Jesús Jesurun, en declaraciones a Caracol Radio. "Sabemos que hay una tensión política en la región pero nosotros nos abstraemos de ella... Será una fiesta futbolística entre dos países que han sido hermanos toda la vida".