Cambios en gobierno catalán antes de referendo secesionista
Cambios en el gobierno catalán antes de referendo secesionista
El presidente catalán Carles Puigdemont efectuó el viernes varios cambios en su gabinete para reforzar el gobierno regional de cara a un referendo sobre la independencia prometido para el 1 de octubre. El gobierno central español sostiene que la votación es inconstitucional y ha prometido enjuiciar a los funcionarios que tomen medidas para realizarlo.
Puigdemont dijo a la prensa que los consejeros (ministros) de seguridad, presidencia y educación, así como el secretario del gabinete, "decidieron hacerse a un lado" para reforzar el gobierno de la región nororiental.
La prensa local informó que los cambios vienen de divisiones internas sobre la factibilidad de realizar un referendo. A inicios del mes, Puigdemont reemplazó a otro colaborador cercano que manifestó públicamente dudas al respecto.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, dijo que los cambios son una "purga" y una señal más de la "deriva autoritaria de un gobierno ensimismado en sus propias rencillas".
Agregó que es una "purga" del gobierno catalán contra los "dudosos, triunfando los radicales". Adicionalmente, preguntó: "¿qué diálogo quiere con esta forma de comportarse?".
España y Cataluña han estado enfrentados desde hace años debido a los planes del gobierno regional para realizar un voto secesionista. Madrid ha recurrido al Tribunal Constitucional ante cada medida tomada por el gobierno catalán y ha conseguido bloquear la mayor parte.
Un proyecto de ley elaborado por los partidos gobernantes de Cataluña los autorizaría a declarar la independencia de España en las 48 horas siguientes a una victoria en el referendo, independientemente de cuántos votantes acudan a los comicios.
Rajoy ha dicho que esta iniciativa de ley es un "delirio autoritario". El proyecto debe ser primer aprobado por los legisladores regionales antes de que las autoridades centrales puedan apelarlo ante el Tribunal Constitucional.
Cataluña, cuya capital es Barcelona, representa una quinta parte del producto interno bruto español.
Los sondeos muestran que los 7,5 millones de catalanes están divididos sobre el tema de la independencia, pero incluso así están a favor de realizar un referendo.