México y su peligrosa costumbre de empezar perdiendo
México ha empezado perdiendo sus tres partidos en la Copa Confederaciones, aunque en todas las ocasiones remontó para conseguir dos victorias y un empate
México ha desarrollado una peligrosa costumbre de comenzar los partidos remando contra la corriente.
El Tri tuvo que remontar el marcador en cada uno de sus tres partidos en la fase de grupos de la Copa Confederaciones. Por el lado positivo, el conjunto dirigido por Juan Carlos Osorio exhibió su capacidad de recuperación y saldó esos encuentros con dos victorias y un empate, para clasificarse a las semifinales del torneo.
Los mexicanos estuvieron en desventaja dos veces frente a Portugal en su debut ante de empatar 2-2 con un gol de Héctor Moreno en la última jugada. Después perdían 1-0 frente a Nueva Zelanda y por el mismo marcador ante Rusia, pero ganaron ambos encuentros por 2-1.
"La verdad es que el equipo ha tenido la personalidad y los tamaños para regresar, pero ojalá que un día podamos ganar un partido sin ir atrás en el marcador", dijo Moreno tras la victoria del sábado ante Rusia. "Lo que es un hecho es que hay que destacar es la resiliencia que tenemos para buscar los partidos, sabemos que si no nos rendimos, siempre vamos a tener una oportunidad".
De hecho, en total México hila cuatro partidos en los que tuvo que remontar el marcador, ya que empezó abajo 1-0 en el empate 1-1 con Estados Unidos por la más reciente fecha de las eliminatorias mundialistas de la CONCACAF en el estadio Azteca.
"Desde ese partido en el Azteca nos pasó, sucede que en algunos juegos el gol (rival) llega muy rápido y no siempre es por méritos del rival, pero lo que está claro es la resiliencia que nos caracteriza y la combatividad que ha sido manifiesta en todos los juegos", afirmó Osorio. "Es algo que siente el jugador mexicano y nos identificamos con la determinación que tienen de competir hasta el final, el darlo todo con esfuerzo, con vehemencia, con unidad y con jugadores valientes".
"Obviamente no es lo que planeamos, pero nos ha tocado ir abajo en los últimos partidos, indicó el portero Guillermo Ochoa. "Nos hemos encontrado con esas situaciones por nuestra forma de jugar, pero hay que darle mérito al grupo al darle la vuelta, el tener la capacidad de sobreponerse, de no caerse y seguir en lo nuestro y creyendo en nosotros".
En todo caso, México sabe que juega con fuego y que ante un rival como Alemania o Chile, sus posibles oponentes en las semifinales el jueves en Sochi, sería muy peligroso empezar en desventaja.
"Sabemos de la capacidad de selecciones que se vienen, expresó el zaguero Luis Reyes. Son más peligrosas y debemos trabajar en estos días para estar listos para que no se vuelva a dar.