NY: Piden al Congreso que combata violencia de pandillas
Padres de adolescentes asesinadas en NY apelan al Congreso federal para que combata la violencia de las pandillas
Los padres de dos adolescentes de Nueva York que fueron asesinadas brutalmente en un presunto ataque de la pandilla MS-13 exhortaron el martes a los legisladores federales a que actúen contra la violencia de las pandillas.
En una corte federal en Long Island, a pocos kilómetros de donde sus hijas fueron atacadas con machetes y bates de béisbol en septiembre de 2016, Evelyn Rodriguez y Robert Mickens se refirieron a su dura experiencia durante una audiencia de la Subcomisión sobre Combate al Terrorismo e Inteligencia de la Cámara de Representantes.
"Los padres y los residentes de la comunidad viven ahora atemorizados y tienen miedo de permitir que sus hijos jueguen afuera", dijo Rodriguez en sus primeras declaraciones. "La pandilla MS-13 es tan impredecible que simplemente no se sabe quién es quién entre ellos. La MS-13 es una nueva clase de asesinos, son niños, niños que matan niños, y a medida que crecen también lo hacen sus técnicas destinadas a reclutar a chicos indefensos para sus malvadas acciones".
Los fiscales federales creen que la MS-13, o Mara Salvatrucha, tiene miles de miembros en todo Estados Unidos, principalmente inmigrantes de Centroamérica. Cuenta con un bastión en Los Ángeles, donde surgió en la década de 1980 como una pandilla callejera, pero también ha infligido violencia en ciudades y suburbios a lo largo de Estados Unidos.
Kayla Cuevas y Nisa Mickens, amigas durante muchos años, fueron atacadas y asesinadas cerca de sus casas en Long Island. Los fiscales dijeron que Kayla, de 16 años, fue blanco del ataque debido a disputas con miembros de la pandilla en su escuela. Y señalaron que Nisa, de 15 años, estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado.
"Mi experiencia en general con la MS-13 antes del asesinato de Nisa era como la de la mayoría de la gente", dijo Mickens, que se postuló sin éxito para formar parte de la junta escolar de Brentwood el mes pasado y se ha convertido en un activista local, al igual que Rodriguez. "El viejo adagio de que uno nunca sabe realmente de algo hasta que lo afecta personalmente es muy cierto".