Hallan 2 cadáveres descuartizados en Cancún
Hallan cadáveres descuartizados y una balacera deja un muerto en Cancún, próxima sede de la asamblea de OEA
Dos cadáveres descuartizados fueron hallados el viernes dentro de unas maletas en la localidad turística mexicana de Cancún, mientras que un sujeto armado murió en un tiroteo en una avenida de la ciudad, donde la OEA efectuará en unos días una reunión regional a la que asistirán los jefes de la diplomacia del continente.
Las maletas con los restos de dos hombres fueron abandonadas en una zona pantanosa fuera del sector turístico de Cancún, dijo la fiscalía del estado caribeño de Quintana Roo. Los cuerpos no están identificados aún.
El jueves en la noche, un individuo murió baleado y otros dos resultaron heridos durante un enfrentamiento con la policía, mientras uno más fue detenido ileso.
La confrontación ocurrió cuando la policía intentó hacer efectiva una orden de arresto y el imputado intentó huir en una camioneta blindada. Policías y soldados de la Marina fueron baleados y dio inicio el tiroteo, según la fiscalía.
La Secretaría de Seguridad Pública dijo que sobre los sospechosos pesaban diversos delitos. "Hemos restablecido el orden y la tranquilidad", aseguró la SSP en su cuenta de Twitter.
El tiroteo ocurrió en una zona del centro utilizada con frecuencia por los turistas para dirigirse a los hoteles, aunque no es la zona hotelera en sí.
En un video publicado en las redes sociales se escuchan ráfagas de armas automáticas en un área de tiendas y centros comerciales.
La OEA efectuará su asamblea general de lunes a miércoles en Cancún, y está prevista la asistencia de los ministros del Exterior de todo el continente.
La violencia azota Cancún desde hace algunos meses, el destino playero más famoso de México y otrora una localidad vacacional tranquila.
El 17 de enero, hombres armados atacaron la fiscalía de Quintana Roo en Cancún con resultado de cuatro personas muertas.
Un día antes, una balacera dejó tres extranjeros y dos mexicanos muertos durante un festival de música en la localidad turística cercana de Playa del Carmen.
Aunque la violencia no ha afectado directamente a los turistas en Cancún, sí lo ha hecho a varias localidades turísticas mexicanas, como Acapulco, en la costa del Pacífico, que registra una alta tasa de homicidios desde hace tiempo. También se ha intensificado en fecha reciente en Los Cabos, en la península de Baja California. De enero a abril de 2017, Los Cabos tuvieron 24 homicidios por mes, por lo que en dos meses suman más que en todo 2016.
En contraste, Cancún, que tiene una población mucho mayor, ha registrado 12 por mes ese año.
La violencia en Los Cabos ha tenido un carácter más espeluznante: este mes, dos cabezas humanas fueron encontradas en una hielera a dos cuadras de la zona turística de Cabo San Lucas.
Días antes, los cadáveres de cinco mujeres y 13 hombres fueron encontrados en 12 fosas clandestinas cerca de San José del Cabo.
Las autoridades atribuyen los homicidios en Los Cabos a disputas entre grupos narcotraficantes, incluidas facciones del cártel de Sinaloa.
El analista de Seguridad Alejandro Hope dijo que los problemas en las localidades turísticas de playa, podrían a la larga afectar al turismo, como sucedió en Acapulco.
Franjas de sectores pobres han surgido en la periferia de muchos sitios turísticos, donde los grupos delictivos encuentran terreno fértil para reclutar a sus miembros, vender droga a turistas y lugareños, y extorsionar a negocios locales, como ocurre en la localidad vacacional de Zihuatanejo, en la costa del Pacífico.
"Se tiene que cambiar el modelo de desarrollo", declaró Hope. "Una zona turística muy aislada, que deja muy poco en impuestos, eso se tiene que cambiar".
"Si quieres tener turismo, tiene que ser más integral, que integre mejor a la población", afirmó el experto.
Los diplomáticos que asistan a la reunión de la OEA muy difícilmente verán o serán afectados por la violencia en Cancún.
La zona hotelera de Cancún se ubica en una franja angosta que puede ser incomunicada temporalmente del resto de la ciudad, y hay hoteles frente a la playa en una parte más aislada al sur de Cancún.
Sin embargo, ésa es solo una solución temporal. Como ocurre en Acapulco, los tiroteos entre grupos delictivos comienzan en las zonas pobres y después alcanzan las zonas turísticas.
"La tentación es de blindar el enclave, que no haya balaceras en la costera, eso no funciona", dijo Hope. "La periferia se come al enclave, inevitablemente", apuntó.