Consejos para López Obrador: con miras al 2018
Son muchas las voces de analistas, periodistas y allegados al político tabasqueño, quienes señalan que el peor enemigo de Andrés Manuel es el mismo Andrés Manuel.
Todos o casi todos los errores que costaron en la derrota de Morena en el Estado de México (que muy probablemente puedan costar y definir una posible victoria de Andrés Manuel, con miras hacia las elecciones presidenciales de 2018), se deben en primer lugar al político tabasqueño, su forma terca y testaruda, incluso anticuadas prácticas (muy similares a las del propio y viejo PRI).
En primer lugar, está claro que en el Estado de México Delfina no era la candidata adecuada, el intento de hacer uso de la imagen de una "maestra", como símbolo de humildad y honradez fue el peor error de todos, por más que sus raíces provengan de una familia sencilla, con una forma de ganarse la vida modesta y de forma honrada, no da por hecho que la candidata en mención sea honrada, eso quedó demostrado cuando se le acusó de desviar dinero del ayuntamiento de Texcoco, con fines "sospechosos" e ilícitos.
Del mismo modo, Eva Cadena se le acusó de recibir dinero en favor de Andrés Manuel y su partido, ahí el segundo error, Morena como partido ha demostrado tener la incapacidad para revisar y verificar, la calidad, honradez y honestidad de sus posibles candidatos dentro de sus bases militantes, Morena se ha convertido en el depósito de chapulines de otros partidos que buscan reivindicar sus aspiraciones personales por encima de los intereses y la ideología (valores) de su partido.
Morena debe dejar de reciclar militantes de otros partidos y empezar por catapultar candidatos propios, comprometidos con los ideales de su partido y que verdaderamente crean en los objetivos y propósitos partidistas.
En tercer lugar sí Andrés Manuel quiere tener más que posibilidades (como sucedió en 2006 y en 2012) de ganar la presidencia en 2018, debe dejar a un lado la terquedad, el orgullo y su actitud déspota y hasta autoritaria. con el único fin de lograr a acuerdos y unir a la izquierda, hacer acuerdos con Movimiento Ciudadano, PT y el más importante el PRD, partido que demostró tener la capacidad de captar una cantidad significativa de votos, cantidad que en las elecciones del Estado de México pudo haber definitorio para la victoria de Morena por una gran diferencia.
Morena debe buscar candidatos que logren sobresalir y sean la imagen del partido, la mayor cantidad posible, de tal forma que ante cualquier señalamiento de la oposición a sus candidatos o militantes, él pueda des enmarcarse con facilidad y evitar ser embarrado como ha pasado, para así cuidar su imagen y no exponerla al desgaste.
El último error al estilo de Donald Trump y del propio Nicolás Maduro, debe dejar de culpar a otros de sus propios errores, lo del caso de Eva Cadena no fue culpa de "la mafia del poder" (aunque queda claro que la usaron para dañar y sabotear a Morena), y mucho menos del "imperialismo" (espero que no llegue a tales extremos porque entonces pónganse a rezar), está claro que fue un error interno del propio partido y del mismo Andrés Manuel por todo lo anteriormente mencionado.
Un verdadero líder debe saber reconocer sus errores, para salir bien librado de todos los obstáculos y retos que sus adversarios y el propio rumbo y curso de la historia le impongan, es una lección que debe aprender.
Como complemento de lo anterior lo recomendable para Andrés Manuel, es empezar por trabajar en su imagen, es difícil decirlo a una persona como es el propio tabasqueño cuya actitud terca, arraigada e incluso arcaica de hacer las cosas (basadas en las enseñanzas de la vieja escuela del PRI, partido del que el mismo se formó) le han bajado puntos ante el electorado, dando la razón a aquellos que lo acusan de ser intolerante, déspota y autoritario como los políticos que mencione (comparaciones que en mi opinión tienen fundamento y son acertados con ciertos límites).
Dichas críticas quedaron claras y demostradas en la entrevista de Radio Formula, entre Andrés Manuel y José Cárdenas o la más evidente, la entrevista con Ciro Gómez Leyva (periodista al que considero tiene una línea muy marcada en lo personal), en ambas entrevistas Andrés Manuel no supo responder de forma correcta a los cuestionamientos de estos periodistas, incluso a José Cárdenas lo acusó de ser imparcial y de estar del lado de la "mafia del poder", su incapacidad para evadir los cuestionamientos está demostrada, incluso con una entrevista del tabasqueño con Carmen Aristegui el 25 de mayo, a la que también acusó de tomar partido.
Soy positivo que las personas pueden cambiar, sí sus convicciones son fuertes y su voluntad es igual o superior en fuerza, sin embargo, con Andrés Manuel tengo más que mil dudas, mas allá de la terquedad que se adquiere con los años, aquella actitud propia de las personas de la tercera edad, pero más que dudas genera pavor tener un posible presidente de la república que con todos estos defectos y actitud, sea no solo incapaz de llegar acuerdos con los demás partidos y generar consenso, sino que sea incapaz de gobernar y llevarnos a lo desconocido, y en el peor de los casos a la deriva.
Aunque no dudo que quienes lo señalan de corrupto e hipócrita comenten el mismo error de juzgarlo y compararlo con personajes no tan deseables, como fue en el caso de Lula da Silva en Brasil, aquel al que también acusaron de ser un peligro para su país y quien perdió varias veces la presidencia pero que una vez hecho un consenso con el sector empresarial y con la sociedad, disipó todos los errores, dudas y miedos sobre su capacidad de gobernar, a pesar de todo fue uno de los mejores presidentes y más emblemáticos de la nación sudamericana. Pero debo aclarar que solo, sí las convicciones y la voluntad de ganar de AMLO son verdaderas e incluso puras, deberá anteponerse así mismo y a los demás, pero solo mediante un proceso de autorreflexión y con la disposición de cambiar y adaptarse.