Policía lanza gas lacrimógeno contra indígenas en Brasil
Policía militar de Brasil lanza gas lacrimógeno y dispara balas de caucho contra manifestación de indígenas
La policía militar brasileña lanzó gas lacrimógeno a miles de manifestantes indígenas, quienes respondieron con lanzas y flechas luego de que la protesta pacífica a las afueras del Congreso se convirtió el martes en una escena caótica.
No hubo reportes de heridos de ninguna de las partes.
De acuerdo con la policía, los manifestantes se acercaron demasiado a una gran fuente ubicada en la explanada frente al Congreso de la capital, Brasilia.
"Los indígenas no se apegaron al acuerdo que hicieron con la policía" sobre los límites de la protesta, se indica en un comunicado de la policía. "Amenazaban con invadir el Congreso".
Los manifestantes rechazaron las acusaciones y dijeron que la policía solo buscaba una excusa para retirarlos del lugar. Afirman que la policía había acordado que los manifestantes podían acercarse a la fuente y que la marcha era pacífica.
"Desafortunadamente, la fuerza bruta de la policía provocó esto", dijo Kleber Karipuna, uno de los manifestantes que llegó a Brasilia procedente del estado de Amapá, en el norte del país. "Es lógico que 3.000 indígenas van a responder" con lanzas y flechas.
Los manifestantes señalaron que al menos cuatro personas fueron arrestadas durante la confrontación, pero la policía no proporcionó detalles.
Brasil, la nación más grande de Latinoamérica, es hogar de varias tribus, muchas de las cuales habitan la región del Amazonas. Son frecuentes los enfrentamientos con los rancheros, las compañías madereras y otras empresas que operan cerca de sus tierras. Sin embargo, los líderes señalan que la violencia se ha recrudecido durante el último año en medio de la crisis económica que atraviesa el país.
Convocaron a acampar toda la semana en frente del Congreso para presentar una larga lista de denuncias. Acusan que el gobierno del presidente Michel Temer busca reducir las protecciones en varias partes de la Amazonia para permitir que los rancheros y otros les roben sus tierras.