Senadores demócratas planean bloquear a Gorsuch
Senadores demócratas afirman que tienen los votos necesarios para bloquear la ratificación del juez Neil Gorsuch
Los demócratas en el Senado afirmaron el lunes que tienen los votos necesarios para bloquear la ratificación del juez Neil Gorsuch, a quien el presidente Donald Trump propuso como magistrado de la Corte Suprema.
Sin embargo, esa victoria es sólo momentánea y prepara el terreno para un choque con los republicanos, quienes pretenden reescribir las reglas del Senado y forzar la ratificación de Gorsuch.
La Comisión de Asuntos Jurídicos aprobó por votación de 11-9 que la nominación de Gorsuch pase al pleno del Senado, donde el líder de la mayoría, Mitch McConnell, prometió que estaría ratificado para el viernes.
Ante la incapacidad para reunir los 60 votos necesarios a fin de superar los obstáculos procesales, McConnell está dispuesto a encabezar a los republicanos en una modificación unilateral a la votación, en la que se bajaría el mínimo de votos para lograr la ratificación a una mayoría simple.
El senador Chris Coons, se convirtió el lunes en el voto crucial 41 favorable a los demócratas y declaró durante el debate en la comisión que el historial conservador de Gorsuch mostraba que éste tenía un enfoque activista hacia la ley y evadió preguntas durante las audiencias para su confirmación.
Coons también dijo que el trato que dieron los republicanos a Merrick Garland, a quien el anterior presidente, Barack Obama, había propuesto para la Corte Suprema, dejó cicatrices permanentes al negarle una audiencia después del fallecimiento del magistrado Antonin Scalia en febrero de 2016.
"Nos encontramos en un momento histórico en la historia del Senado de Estados Unidos" debido al proceder de ambos partidos, señaló Coons.
"Hemos socavado el proceso de alcanzar acuerdos y deshonramos nuestra larga tradición de actuar por encima de partidismos", agregó.
Al final del día, 43 demócratas habían dicho que no apoyarían a Gorsuch.
Las consecuencias de largo plazo del próximo enfrentamiento podrían ser profundas, porque los cambios a las reglas que los republicanos pretenden decretar se aplicarían también a futuros nombramientos para la Corte Suprema, lo que permitiría ratificarlos sin participación del partido minoritario.