Exagente de la CIA sale libre en Portugal, evita extradición

Una corte de Lisboa indultó el miércoles a último minuto a una ex agente estadounidense de la CIA por lo que ya no será extraditada de Portugal a Italia, donde una corte la halló culpable de participar en el secuestro de un clérigo musulmán.

La corte falló que Sabrina de Sousa debe ser puesta en libertad inmediatamente dado que Italia canceló el pedido de detención y extradición contra ella. La corte dio una copia de su dictamen a The Associated Press.

La decisión ocurrió horas antes que De Sousa iba a ser extraditada y un día después de que el presidente de Italia conmutara su sentencia. El presidente Sergio Mattarella perdonó uno de los cuatro años de sentencia de De Sousa, acusada de participar en el secuestro de Osama Moustafa Hassan Nas, también conocido como Abu Omar, quien fue secuestrado de una calle en Milán en febrero del 2003.

De Sousa ni su abogado portugués estuvieron disponibles inmediatamente para comentar sobre lo ocurrido.

No estaba claro si es que se le pedirá a De Sousa, quien tiene ciudadanía estadounidense y portuguesa, que cumpla los tres años de sentencia restantes en Portugal. Conforme la ley italiana, ella podría seguir bajo arresto domiciliario o realizar trabajo comunitario en vez de ir a la cárcel.

De Sousa fue detenida en el aeropuerto de Lisboa con una orden de arresto europea en octubre del 2015, cuando se dirigía a India a visitar a su madre. Ella ha dicho que estaba viviendo en Portugal y que tenía la intención de establecerse allí.

Ella peleó varias veces contra su extradición y perdió varias apelaciones tras su arresto. De Sousa negó haber participado en el secuestro y argumentó que nunca se le informó sobre el fallo de culpabilidad de la corte italiana y que no podía usar información confidencial del gobierno estadounidense para defenderse.

A De Sousa se le confiscó su pasaporte, pero siguió libre en Portugal hasta la semana pasada, cuando fue detenida para ser procesada por extradición.

El secuestro fue llevado a cabo de acuerdo con un programa antiterrorista estadounidense, que fue lanzado tras los ataques terroristas del 11 de septiembre del 2001. De acuerdo con el programa, sospechosos eran secuestrados y transferidos a centros en el extranjero, donde eran interrogados y muchas veces torturados.

Mattarella explicó que para conmutar la sentencia de De Sousa, tomó en cuenta "que Estados Unidos ha interrumpido la práctica de secuestros de sospechosos", en referencia a la decisión del gobierno del ex presidente Barack Obama de parar el programa.

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La corresponsal de The Associated Press Frances D'Emilio contribuyó a este despacho desde Roma.