Connecticut busca traslado de presunto asesino salvadoreño
La policía busca llevar de regreso a Connecticut a un salvadoreño que huyó del estado con su hija de seis años después de asesinar a la madre de la menor
La policía busca llevar de regreso a Connecticut a un salvadoreño que huyó del estado con su hija de seis años después de asesinar a la madre de la menor.
Oscar Hernández fue arrestado el viernes en Pennsylvania tras una persecución a alta velocidad y un choque en la carretera Interestatal 99. Su hija, Aylín Sofía Hernández, sufrió heridas menores en el choque, informaron las autoridades.
Rowena White, portavoz de la policía de Bridgeport, dijo que se desconoce cuándo Hernández será trasladado a Connecticut, pero señaló que los investigadores trabajan con las autoridades de Pennsylvania al respecto. Hernández se encuentra bajo arresto de la Policía Estatal de Pennsylvania como prófugo de la justicia y también enfrenta cargos en ese estado.
El diario The Hartford Courant reportó que los investigadores en Bridgeport obtuvieron una orden de arresto contra Hernández por asesinato.
White indicó que las autoridades de Bridgeport investigan también los detalles de la situación migratoria de Hernández, de origen salvadoreño.
Las autoridades federales de inmigración confirmaron que Hernández fue deportado el 27 de noviembre de 2013. Hernández tiene condenas previas por agresión y amenazas. El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés) había emitido una orden de detención contra él.
La policía de Bridgeport emitió la orden de arresto contra Hernández luego que los agentes no lograron hallar a la niña el viernes por la mañana cuando acudieron a su casa y encontraron a su madre, Natalia González, muerta a cuchilladas. Otra mujer también fue acuchillada en la casa, pero se espera que sobreviva.
El incidente del viernes generó una alerta de menor secuestrad en varios estados.
El incidente se produce luego que el gobernador de Connecticut, el demócrata Dannel P. Malloy, emitió una orden ejecutiva a los jefes de policía instruyéndoles no actuar con el mero propósito de implementar leyes de inmigración. El gobernador dijo que el gobierno federal no puede ordenar a los estados que investiguen o implementen acciones que ni tienen conexión con las leyes del estado.
A una pregunta el sábado sobre el caso de Hernández, la portavoz de Malloy, Kelley Donnelly, le dijo a The Associated Press que "los delincuentes convictos son detenidos para ser deportados bajo las leyes estatales que el gobernador ha apoyado coherente y fuertemente".