Una fórmula para evaluarlos a todos
Desde que asistía al liceo, me preocupó el asunto de que, en las evaluaciones con un porcentaje de exigencia superior al 50%, los profesores aplicaran dos fórmulas y, por ende, dos rectas, para construir la escala de notas. Esto me parecía injusto por el simple hecho de que se aplicaban dos escalas diferentes a un mismo grupo de alumnos sometidos al mismo instrumento. Si un grupo de alumnos estudia los mismos contenidos y es sometido a un mismo instrumento de evaluación, debería ser evaluado con un solo y mismo criterio: no con dos. Así que me decidí finalmente, cuando ya estaba en la universidad estudiando pedagogía, a encontrar una manera de resolver este error.
Presumí que la forma más apropiada de fundir los dos criterios de evaluación en uno solo sería distinguir los tres puntos que ambos criterios tienen en común, esto es, la nota mínima (1,0), la nota de aprobación (4,0) y la nota máxima (7,0). Luego tenía que ubicarlos en el plano cartesiano con sus correspondientes puntajes. Así, distinguí los puntos A (0, 1), B (pn/100, 4) y C (n, 7), donde p es el porcentaje de exigencia y n es el puntaje máximo del instrumento. Desde ellos, calculé una curva que, sin importar las variables, siempre pasa por los puntos A, B y C y di con la «fórmula general de evaluación» (FOGE): ((30.000 - 600p) / (p²n² - 100pn²))x² + ((6/n) - ((30.000 - 600p) / (p²n - 100pn)))x + 1 = y, donde x es el puntaje obtenido por cada alumno.
Al aplicarla, no obstante, noté que esta fórmula tiene un comportamiento inesperado. Nuestra escala evaluativa parte en la nota 1,0 y llega a 7,0: no puede haber notas inferiores a 1,0 ni superiores a 7,0. Además, las notas deben ir aumentando siempre, no aumentando o disminuyendo de manera alternativa. Resulta que la FOGE arroja notas fuera de la escala cuando 25 ≤ p ≤ 75. Y, además, la escala no es «monódroma», es decir, sus notas no van en ascenso constante cuando 25 ≤ p ≤ 75. Así que me encontré con que esta fórmula, aunque útil, está limitada. Conseguí, por cierto, fundir los dos criterios en uno solo, pero no de manera universal. No hay muchos profesores, ciertamente, que apliquen un porcentaje de exigencia superior al 75%, pero sí los hay: a mí me aplicaban el 80% en las asignaturas de competencia comunicativa escrita. Y, en estos casos, la FOGE resulta inaplicable.
No he encontrado una solución, pero asumo que la hay. Creo que no la puedo encontrar solo a causa de mis limitados conocimientos matemáticos, así que espero hallar a alguien que sí sea capaz de calcular una curva que pase por los puntos A, B y C manteniéndose en los confines de 1 ≤ y ≤ 7 con una trayectoria «monódroma». Por el momento, la FOGE resulta útil en la mayoría de las situaciones e incluso cuenta con un programa en línea que permite su aplicación desde cualquier dispositivo conectado a Internet. Pero tengo la esperanza de que podrá ser corregida y fijada en una forma que no admita errores.