Toda la prensa capitalina ha iniciado una caza en jauría contra el Celta de Vigo. Un equipo que ha demostrado sentido común a las órdenes de Berizzo, un entrenador de los que ya no quedan. El otro día en rueda de prensa saltó la alarma y el propio técnico argentino le dijo a los periodistas: "Sé que lo que estaba diciendo no tenía ningún sentido. Es la alarma de la sensatez". El cauto Berizzo tiene clasificado al Celta en las semifinales de la Copa y en diciseisavos de final de la Europa League.
El club gallego revive noches gloriosas y esta temporada le ha ganado 4-3 al FC Barcelona, 4-1 al Deportivo de la Coruña en el derbi y ha eliminado al Real Madrid de la Copa del Rey. De esta forma, el equipo de Florentino Pérez se ha quedado sin opciones de cosechar el añorado triplete, que nunca ha conquistado el conjunto madridista en su larga historia.
El encuentro Celta de Vigo - Real Madrid ha sido suspendido por el tremendo temporal que azota Galicia con rachas de hasta 160km/h. Sin embargo, la pléyade de florentinistas conformada por el Marca, Pedrerol, Eduardo Inda, Juanma Rodríguez, Tomás Roncero y demás bufones han orquestado una campaña chusquera para dar a entender que el partido se podía y se debía haber disputado.
A pesar de que una mujer ha fallecido como consecuencia del temporal, de que 14.000 hogares gallegos han estado sin luz y de que era un riesgo jugar el partido, no han tenido ningún reparo para señalar como culpables al Celta de Vigo, al ayuntamiento, al alcalde y a Berizzo. El cinismo de estos personajes se ha volcado en prensa escrita con una portada funesta del diario Marca, en radios, en televisiones y en redes sociales.
Sin embargo, este tipo de actos es fácilmente desenmascarable. Así lo hizo la cuenta de Accidentes Laborales contestando a Pedrerol: "Los trabajadores no somos de usar y tirar ni nuestras vidas valen menos que su derecho a divertirse. Usted es la prueba palpable de lo que en esta cuenta denunciamos: la falta de sensibilidad de algunos periodistas con los trabajadores".
La sociedad civil española ha encendido la alarma de la sensatez y está desenmascarando a todo lo que pretende hacerse pasar por periodismo deportivo. No son más que medios de comunicación al servicio de los poderosos.