Un goleador Farías contribuye en ascenso de América de Cali
El cañonero argentino Ernesto Farías contribuyó en el regreso de América de Cali a la primera división del balompié colombiano
El cañonero argentino Ernesto Farías contribuyó en el regreso de América de Cali a la primera división del balompié colombiano.
Farías, de 36 años, llegó a Colombia en 2015 y ese año aportó 15 goles. En la presente temporada lleva 13, entre ellos el primero del triunfo por 2-1 ante el visitante Deportes Quindío de Armenia en el juego del domingo correspondiente al grupo B del torneo de ascenso.
La final del cuadrangular A será disputada el lunes por la noche Deportivo Pereira, en segunda división desde hace cinco años, y Leones.
Antes de vincularse con América, Farías desfiló por equipos argentinos, entre ellos Estudiantes con el que debutó en 1998, River Plate e Independiente y jugó además para Palermo de Italia, Porto de Portugal, Cruzeiro de Brasil y Danubio de Uruguay.
"Es mi sueño retirarme en este club por el cariño de la gente, pueda ser que se dé", declaró en el portal Futbolred de Colombia el lunes. "Logré lo que vine a conseguir (el ascenso), quiero jugar un año más en primera y retirarme con esta camiseta".
El conjunto rojo había descendido al perder en penales ante Patriotas de Tunja en diciembre de 2011.
El triunfo acabó con cuatro intentos fallidos del América por regresar a la máxima división del fútbol local donde fue protagonista al lado de Millonarios de Bogotá y Atlético Nacional de Medellín. El club, con 89 años de historia, ostenta 13 títulos en la liga local y en cuatro ocasiones alcanzó la final de la Copa Libertadores.
Junto al "Tecla" Farías brilló el técnico colombiano Hernán Torres, que tomó el mando a mitad de campaña y reorganizó el plantel. Torres ganó prestigio al llevar a Millonarios a ganar la 14ta corona en 2012 tras 24 años de fracasos. Ahora se afirma que es el estratega que hace posible lo imposible.
La celebración de las barras se extendió hasta las primeras horas del lunes y hubo algunos desmanes, incluyendo choques de fanáticos con la policía en los alrededores del estadio Pascual Guerrero y daños en las vidrieras de autobuses del transporte público.
La secretaria de Gobierno de Cali, Laura Lugo, confirmó que luego del partido hubo cuatro muertos y uno podría estar vinculado con la fiesta popular. La ley seca fue aplicada en un intento por evitar incidentes.