Gobierno argentino pone vencimiento al fútbol gratis por tv
Gobierno de Mauricio Macri dejará de pagar a partir de 2017 por derechos de televisión de los partidos de la liga argentina
Un nuevo dolor de cabeza se le avecina al fútbol argentino por la decisión del gobierno de Mauricio Macri de cortar a partir de 2017 con la principal fuente de recursos de los clubes: los millones que desembolsa el Estado a cambio de los derechos de televisión de los partidos.
No hubo todavía una comunicación oficial, pero la agencia estatal Télam informó el martes que el presidente Macri ratificó en una reunión con funcionarios responsables del programa "Fútbol para Todos" --como se denomina la televisión gratuita de partidos de primera división-- "que a fin de año el Estado dejará de aportar plata (dinero) para la transmisión televisiva del principal deporte del país".
Un total de 1.850 millones de pesos (119 millones de dólares) saldrán este año de las arcas públicas hacia la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) como parte del contrato firmado en 2009, cuando la entidad rompió el acuerdo con una empresa privada dueña de los derechos de televisión --Grupo Clarín-- y se los cedió al gobierno de la entonces presidenta Cristina Fernández.
El gobierno de Macri aduce que no corresponde seguir girando millonarios fondos provenientes de los impuestos de los argentinos hacia la AFA tras comprobarse en la justicia serias irregularidades cometidas por la entidad la administración y distribución de ese dinero.
La novedad se conoce en momentos en que varios clubes agobiados financieramente reclaman a la AFA más dinero y amenazan con decretar una huelga.
El contrato entre el Estado y la AFA termina en 2019.
A partir de la decisión del gobierno de romper el convenio, la AFA debe salir a buscar con urgencia a un nuevo socio para explotar los derechos de televisión. El problema es que la entidad está intervenida por una comisión normalizadora designada por la FIFA y que en las últimas semanas ha recibido fuertes cuestionamientos por parte de los clubes más poderosos del país que le exigen la rápida convocatoria a elecciones.