Hoy me siento Ad hoc
"Hoy amanecí ad hoc", me digo a mí misma cuando siento que hoy todo me va bien. No sé si sea yo una de tanta mujeres que siente esto.
Estar ad hoc es como armonizar con el entorno. Es cuando puedes salir con la seguridad de que te voltearán a ver y disfrutarás de los pasos que des o de lo que suceda con la gente que te rodea. Hoy se me antoja estar ad hoc y de repente noto que empiezo a caerle bien hasta al cuate que vende pollo en la esquina de la calle donde vivo. Nomás porque sí, porque hoy las hormonas no jugaron conmigo y me permitieron dormir bien, despertar de buenas, sin pelearme ni con la alarma ni con el que pasa gritando "la basuraaaaa" con su vocecita chillona a las 7:30 a.m. sea lunes o sábado y además me siento bonita.
Es nefasto cuando nos sucede lo contrario, cuando dichas hormonas se ensañan y nos atacan con sus bromitas pesadas y sin sentido. Cuando te has levantado de la cama y manchado las sábanas que más te gustan... "fuck"! Es increíble cómo cambia mi día con estos comienzos. Con los cólicos y el humor más negro que... bueno, me gusta el color, sin embargo lo negro pues no es igual que un humor blanco o uno azul claro. Pero cuando sucede esto y te ves al espejo y ni tú misma te caes bien, no quieres salir, ni hablar con nadie, mucho menos ser vista, pues sientes que tu abdomen se infla cual globo de cantoya y nada te queda, nada te gusta, "¡odio odiar!".
Es tan desagradable que a veces no puedes controlar tu humor desde tan temprano, cuando aún ni has hablado con nadie, a pesar de haber recibido tal vez un whatsapp con un "buenos días" de la persona que amas. Sin embargo, tu mecanismo de defensa está alerta y en posición de ataque, cual mamífero salvaje hambriento. Muy inconveniente, no saber ni explicarle a tu pareja por qué no quieres ni que te voltée a ver, que si te hablan te deshaces, que si te ven feo lloras, que si quieres un piropo y no te lo dan, sientes que te mueres, ¡pero no tienes idea de qué demonios te sucede! ¿Habrá alguien que me crea?
Afortunadamente no sucede todos los días, aunque he pensado en llevar un calendario con los días en que me siento ad hoc y los que no tanto, los que estoy con un genio "del nabo" y los que soy la más feliz. Es similar una montaña rusa, larga, con más subidas que bajadas, pero las bajadas que hay son en picada. Creo que ninguna mujer se salva de ella, de este juego mecánico tan difícil de controlar y las montañas rusas de algunas seguro son más empinadas o más largas, más horribles o menos seguras. Lo que sí es que dichas circunstancias son de todas nosotras y algunas más otras menos, pero siempre hay segurito un día en donde nos sentimos del carajo.
Sería fabuloso inventar un medidor de qué tan ad hoc estaré el día de mañana, si no para ni hacer el intento de levantarme, así poder quedarme tirada y disfrutar de mi mal humor, pero en cama, no escuchando al imbécil de mi jefe pidiéndome que me apure o que entregue lo que me pidió, viendo mi reloj cada 5 minutos esperando a que acabe el día. El otro día leí que ya habían hecho una ley que ampara a las mujeres cuando están "en sus días" para que sus faltas o sus salidas antes de tiempo en la oficina o en su lugar de trabajo sean justificadas. ¿Ya será oficial?
Espero que sí, aunque no me importa porque en este momento no tengo trabajo. ¿Será por eso que me siento ad hoc?