¿Cómo se siente, Bob Dylan?

Por haber creado nuevas expresiones poéticas en el marco de la gran tradición musical americana.

Jean-Paul Sartre fue premio Nobel de literatura y lo rechazó por ser congruente con su filosofía. No quería ser recordado como EL PREMIO NOBEL Jean-Paul Sartre ya que lo cosificaba (lo convertía en cosa). Valiente postura. Pero la Academia Sueca siempre será criticada, al menos en los premios a la paz y a la literatura. Particularmente en la literatura pues al ser una parte de la estética responde a gustos y contextos.

Las estadísticas marcan una tendencia a preferir autores de habla inglesa. No sé qué tanto la academia reaccione a las críticas, pero las últimas es que ha preferido autores de un lenguaje elevado y que pocas personas entienden o leen. Ahora la crítica es precisamente por haberlo otorgado en el sentido completamente opuesto. Un compositor de música popular. Reconocido por haber hecho poesía en sus letras, la duda es ¿escribir canciones es hacer literatura?

La pregunta que quiero resolver es: ¿Qué puso en el mapa de la literatura a Bob Dylan? Sus dos únicos libros escritos, un libro de poesía (un desastre) y una biografía (una maravilla), no fueron juzgados por la Academia Sueca. Fueron las letras de sus canciones. Pero hay premios para la composición musical. ¿Será que en Harvard hay una materia de maestría dónde se analizan sus letras? ¿Será que desde hace tiempo Dylan es considerado un escritor más que un músico?

Si de algo puedo estar seguro, es que la Academia es valiente. ste año no quiso dar su premio a los candidatos eternos, quiso sorprender, quiso hacer las cosas distintas. Como con el Nobel de la Paz, no creo que sea malbaratar el premio. Creo que fortalece la fama del premio. Ninguna sorpresa hubiera causado que lo ganara Murakami. Me gusta que las cosas se hagan diferentes. Que se reconozca que el arte puede venir en distintos empaques, que la literatura pueda ser apreciada lo mismo en una canción que en los diálogos de una película.

Reconozco a la Academia Sueca por salir del molde, por hacer algo que nadie había pensado. Por sorprender a todos, por darle el premio Nobel de literatura a Bob Dylan. Porque, tal vez, será un impulso para que la música regrese a esa poesía que la dominó durante los 60´s. Imagino a un Jim Morrison cuyas letras tenían la fuerza suficiente para ser poesía. Creo que debe ser la reivindicación de una época donde había que expresar tantas cosas. El medio fue la música, no las páginas. El medio es lo distinto.

Es el premio Nobel el que se ganó a Bob Dylan. Se lo agenció. Hoy se hablará más del premio Nobel de literatura que de ningún otro. No hubiera sido lo mismo con otro ganador.

Bravo por la Academia, dio señales de vitalidad, de originalidad.

¿Y Bob Dylan?

Como una piedra que rueda.