Tite devuelve la esperanza a la selección brasileña
Con tres victorias en sus tres primeros partidos al mando, el técnico Tite devuelve la esperanza a una selección brasileña que se ubica segunda en la eliminatoria mundialista
"¡Ole, ole, ole ole... Titeeee, Titeeee!".
Mientras el cántico retumbaba en la Arena das Dunas el jueves en Natal, el blanco de la adoración de los 30.000 fanáticos se retiró del costado de la cancha hacia la banca. Adenor Leonardo Bacchi, conocido como Tite, todavía no se acostumbra a ser el técnico de la selección de Brasil, aunque los brasileños parecen estar enamorados del timonel.
Con la selección mayor sumida en una crisis y fuera de los puestos de clasificación directa al Mundial, Brasil despidió a Dunga y contrató a Tite, entonces timonel del club Corinthians. En sus tres partidos al mando, la Verdeamarela venció a Ecuador (3-0), Colombia (2-1) y Bolivia (5-0), este último el partido más reciente el jueves en Natal.
La buena racha dejó a Brasil en el segundo lugar de la tabla, a un punto del líder Uruguay, y con los ánimos por las nubes.
"Armaremos un equipo con grandes jugadores, que jueguen en los mismos puestos en los que juegan con sus clubes", dijo Tite en su primera conferencia de prensa tras ser contratado.
Hasta ahora, ha cumplido con su palabra.
Neymar está ubicado en el extremo izquierdo, como lo hace con el Barcelona, en lugar del puesto de enlace o incluso centrodelantero que quisieron asignarle Dunga y su predecesor Luiz Felipe Scolari.
Tite, un pupilo del técnico italiano Carlo Ancelotti, también ha fomentado más triangulaciones y mini sociedades en la cancha.
"Quiero que cada jugador que tenga la pelota tenga al menos dos opciones claras de pase", ha dicho.
El timonel gusta de jugadores con espíritu de equipo y polivalentes, como el volante de Beijing Guoan, Renato Augusto. Todo apunta a que Brasil ya no buscará a un volante creativo que genere la ofensiva desde el centro del campo, y Tite tampoco prefiere los centrodelanteros de área como Fred.
En cambio, su filosofía se inclina más por jugadores móviles como Philippe Coutinho, quien solía ser obviado en las convocatorias de Dunga.
"Sentimos que el ambiente ha mejorado", señaló el veterano zaguero Dani Alves tras la victoria ante Bolivia.
El próximo partido de Brasil es el martes en Venezuela, aunque los hinchas ya anticipan el duelo del 10 de noviembre en Belo Horizonte contra Argentina.
"Si pudiese iría manejando a verlos", dijo el taxista Carlos Campora mientras manejaba de salida de la Arena das Dunas el viernes por la madrugada. "Tite nos ha hecho creer en la selección. Eso lo hace especial".