Puedes lograr hacer lo que quieras con trabajo duro
Es difícil ver que los días pasan y darte cuenta que algo parece estar estancado en tu vida, me emociona demasiado encontrar personas en este mundo que han luchado tanto y ahora puedo ver lo mucho que han logrado. Uno de los artistas a los que admiro, dijo una vez, "puedes lograr hacer todo lo que quieras con trabajo duro", lo que intentó decir con esas palabras, es que muchas veces nos limitamos porque no nos creemos capaz de hacer las cosas, porque solemos decepcionarnos rápidamente de nosotros mismos, la perseverancia no es nuestra compañera frecuente, eso me pasa seguido, intento y al fallar simplemente lo dejo. Por eso la mediocridad suele visitar nuestras vidas.
No hay nada que no podamos lograr con trabajo duro, realmente se oye tan hermoso al principio, pero no podemos ver lo que esto significa en realidad, no es solo una frase esperanzadora es una frase que reta, que propone, una frase que debería ponernos a pensar seriamente sobre nuestra forma de manejar las cosas, es una frase que puede destruirte si no estás preparado para "trabajar duro". Personalmente lo he creído así porque, al escucharla por primera vez, pensé que realmente puedo lograr lo que quiera y me motiva a ponerme metas a diestra y siniestra, pero olvidamos la segunda frase y quizá la más importante parte de la frase "trabajar duro", realmente no podemos llegar a comprender lo mucho que eso quiere decir. Va desde dejar las cosas que más nos gustan (y distraen improductivamente) a enfocarnos totalmente en eso que estamos buscando, es no descansar hasta lograrlo, es intentarlo fuertemente una y otra vez, es no distraerte en el camino, es abandonar todas las cosas que te aparte de esa meta que quieres lograr.
El trabajar, no es solo trabajar, es trabajar duro, fuerte y constante, incluso más allá de lo que nosotros creemos que somos capaces, más allá de lo que otras personas nos digan que podamos o no podamos hacer. El trabajar duro no es producto de la suerte o un regalo de la naturaleza, es lograrlo por tus propios medios, es no rendirte porque tienes un aparente límite, es realmente buscarlo, como si de eso depende tu vida, los sueños que nos hacen felices.
Trabajar duro, es dejar de volar y tocar el piso, trabajar duro es bajarte de la nube y ponerte a hacer algo, trabajar duro es no dudar, no esperar, trabajar duro es estar seguro y buscarlo fuertemente. Trabajar duro es dejar de ser espectador y pasar a ser una parte importante del acto. Es poder realmente tomarte de la mano a ti mismo y llevarte por el camino que tanto quieres recorrer pero tienes miedo de ir en él, sin esperar que nadie lo haga por ti.
Tener miedo de recorrer el camino es normal, pero el hecho de que sea normal significa que debemos dejar que se aloje en nosotros como factor predominante, tener miedo está bien... pero hasta cierto punto, hasta el punto que nos permita avanzar con cuidado, avanzar midiendo cada paso con cuidado. El miedo es saludable, positivo y hasta puede servir como impulso si se sabe canalizar, el miedo es la forma más maravillosa de sentirse humano, y el superarla es la forma más maravillosa de sentirse un superhumano. El miedo será siempre nuestro más fiel compañero, caminando siempre a nuestro lado, no podemos dejar que vaya delante de nosotros, para que nos supere, ni tampoco podemos dejarlo atrás, para vivir sin miedo y sin precaución, el miedo también puede ser un trampolín.