Los siete seres imaginarios más fantásticos descritos por Borges
¿Te gustan los seres de otros mundos?
En 1957 Jorge Luis Borges publicó: Manual de zoología fantástica que después pasó a ser El libro de los Seres Imaginarios donde describe criaturas provenientes de algunas mitologías como la griega o de culturas como la japonesa o de la India, algunos más son animales soñados por escritores como Edgar Allan Poe, Kafka, Lewis Carroll, Flaubert y C.S.Lewis.
En este espacio te presentamos siete de esos seres, la mayoría creados por la propia humanidad y que han hecho sus apariciones en historias de la pantalla grande o que tomaran vida cuando los descubras.
Entre los más conocidos están, por ejemplo: La mandrágora que hace su aparición en Harry Potter y la cámara secreta, Borges nos menciona que algunos otros autores como Plinio el Viejo, [ científico, naturalista y militar latino] dice que su color indica su sexo: "Blanca es el macho y negra es la hembra". El can cerbero es ese perro con tres cabezas que también aparece en la primera parte de Harry Potter. El Kraken fue motivo para Alfred Tennyson y escribió un poema y de Lilith seguro haz escuchado hablar por ser la primera esposa de Adán.
Bueno sin más comencemos con uno de los más divertidos y el cual te hará pensar dos veces la próxima vez que quieras llamar a tu hermano "Cabeza de huevo"
El Cien Cabezas
El cien cabezas es un pez creado por el Karma de unas palabras, por su póstuma repercusión en el tiempo. Una de las biografías chinas del Buddha refieres que éste se encontró con unos pescadores, que tiroteaban de una red. Al cabo de infinitos esfuerzos sacaron a la orilla un enorme pez, con una cabeza de mono, otra de perro, otra de caballo, otra de zorro, otra de cerdo, otra de tigre, y así hasta el número cien.
El Buddha le preguntó:
- ¿No eres Kapila?
- Soy Kapila- respondieron las cien cabezas antes de morirs.
El Buddha explicó a los discípulos que en una encarnación anterior, Kapila era un Brahmán que se había hecho monje y que a todos había superado en la inteligencia de los textos sagrados. A veces, los compañeros se equivocan y Kapila les decía " cabeza de mono", "cabeza de perro", etcétera. Cuando murió, el karma de esas invectivas acumuladas lo hizo renacer monstruo acuático, agobiado por todas las cabezas que había dado a sus compañeros.
El Catoblepas
Plinio[VII,32] cuenta.
"Fiera de tamaño mediano y de andar perezoso. La cabeza es notablemente pesada y al animal le da mucho trabajo llevarla; siempre se inclina hacia la tierra. Si no fuera por esta circunstancia, el Catoblepas acabaría con el género humano, porque todo hombre que le ve a los ojos, cae muerto"
"El Catoblepas, búfalo negro, con una cabeza de cerdo que cae hasta el suelo, unida a las espaldas por un cuello delgado, largo y flojo como un intestino vaciado. Está aplastado en el fango, y sus patas desaparecen bajo la enorme melena de pelos duros que le cubren la cara: - grueso, melancólico, hosco, no hago otra cosa que sentir bajo el vientre el calor del fango. Mi cráneo es tan pesado que es imposible llevarlo.
-Nadie, Antonio, ha visto mis ojos, o quienes los vieron han muerto. Si levantara mis párpados- rosados e hinchados- te morirías en seguida.
Los Lamed Wufniks
Hay en la tierra, y hubo siempre, treinta y seis hombres rectos cuya misión es justificar el mundo ante Dios. Son los Lamed Wufniks. No se conocen entre sí y son muy pobres. Si un hombre llega al conocimiento de que es uno de ellos muere inmediatamente y hay otro, acaso en otra región del planeta que toma su lugar.
Constituyen sin sospecharlo, los secretos pilares del universo. Si no fuera por ellos, Dios aniquilaría al género humano.
¿Serás tú uno de ellos?
El gato de Cheshire
Existe un expresión en inglés: grin a Cheshire cat ["Sonreír sardónicamente como un gato de Cheshire"] Por lo tanto se han propuesto varias explicaciones, una que en Cheshire se vendían quesos en forma de gatos que reían. Otra que en los tiempos de Ricardo Tercero hubo un guardabosques, Caterling, que sonreía ferozmente al batirse con los cazadores furtivos.
Lo cierto es que en la novela de Alicia en el país de la maravillas publicada en 1865, Lewis Carrol otorgó un papel a este gatito que desaparece gradualmente hasta no dejar otra cosa que su sonrisa.
Youwarkee
En su Breve historia de la literatura inglesa Saintsbury considera que Youwarkee es una de las heroínas más deliciosas de esa literatura. Mitad mujer y mitad pájaro o - como escribiría el poeta Browning de su esposa muerta, Elizabeth Barrett- mitad ángel y mitad pájaro. Sus brazos pueden abrirse en alas y un sedoso plumón cubre su cuerpo. Mora en una isla perdida de los mares antárticos; ahí la descubre un náufrago, Peter Wilkins, que se casa con ella.
Esfinge
La esfinge ha sido recogida por dos culturas la egipcia y la griega,[ por Herodoto, para distinguirla de la griega]es un león echado a la tierra y con cabeza de hombre; representaba, la autoridad del rey y custodiaba los sepulcros y los templos.
La esfinge griega tiene cabeza y pechos de mujer, alas de pájaro, y cuerpo y pies de león. Otros le atribuyen cuerpo de perro y cola de serpiente. Se refiere que asolaba el país de Tebas, proponiendo enigmas para los hombres, y devorando a quienes no sabías resolverlos.
El Minotauro
La idea de una casa hecha para que la gente se pierda es tal vez más rara que la de un hombre con cabeza de toro, pero las dos se ayudan y la imagen del laberinto conviene a la imagen del minotauro. Queda bien que en el centro de una casa monstruosa haya un habitante monstruosos.
El minotauro, medio toro y medio hombre, nació de los amores de Pasifae, reina de Creta, con un toro blanco que Poseidón hizo salir del mar. Dédalo, autor del artificio que permitió se realizarán tales amores, construyó el laberinto destinado a encerrar y a ocultar el hijo monstruoso. Este comía carne humana; para su alimento, el rey de Creta exigió anualmente de Atenas un tributo de siete mancebos y de siete doncellas.