Guatemala denuncia en la ONU "graves actos" de Belice

Guatemala denunció el jueves ante las Naciones Unidas "actos graves" de Belice que "dañan de manera directa la relación bilateral".

El presidente guatemalteco Jimmy Morales expresó ante la Asamblea General de la ONU su inquietud por las crecientes tensiones tras la muerte de un menor en la frontera con Belice, que atribuye a soldados beliceños, ocurrida el 20 de abril, en el marco de una disputa territorial centenaria.

Morales dijo que su país desea resolver la disputa territorial a través de la Corte Internacional de Justicia y mantener "una relación privilegiada y un diálogo permanente" para resolver los problemas comunes con Belice.

"Sin embargo, en los últimos meses no hemos encontrado una actitud recíproca del gobierno de Belice", expresó.

Afirmó que desde 1999 Guatemala ha sufrido diez víctimas civiles "en la zona de adyacencia administrada por Belice", incluido Julio Alvarado, "un niño de 14 años que fue víctima de un ataque perpetrado por grupos armados a las órdenes de una patrulla armada del ejército" beliceño en abril.

Indicó que, de acuerdo con médicos de Belice, el niño recibió nueve disparos.

La Organización de los Estados Americanos investigó el incidente y exculpó a los soldados beliceños, aduciendo que los disparos habían sido hechos por guardabosques civiles de una organización no gubernamental. Guatemala, no obstante, rechazó el informe por considerar que tenía varias fallas e insiste en que los guardabosques estaban al mando de un oficial del ejército.

Morales sostuvo que episodios como este "obstaculizan los avances hacia la construcción de una relación de confianza" con ese país vecino.

Guatemala y Belice mantienen una disputa territorial derivada del reclamo guatemalteco de unos 12.000 kilómetros de territorio beliceño la mitad de ese país_, además de cientos de islas e islotes.

Luego del incidente de abril, Guatemala retiró a su embajador de Belice y reforzó la presencia militar en la frontera.

Morales dijo que quería llamar la atención sobre los peligros que representa el impasse para la comunidad internacional porque "no es un secreto que poderosas organizaciones criminales internacionales medran de las diferencias entre los estados y son capaces de ocupar bolsones de territorios indefinidos donde no hay un control efectivo".