Uruguay rechaza ultimátum de ex prisionero de Guantánamo

El gobierno uruguayo desestimó el lunes un ultimátum del refugiado sirio Abu Wa'el Dhiab, ex prisionero de Guantánamo que lleva más de un mes en huelga de hambre en reclamo de que se le permita irse del país para reencontrarse con su familia.

Dhiab había dado plazo hasta el domingo al gobierno para que le anunciaran una oferta para dejar el país, pero Christian Mirza, el delegado del gobierno para los refugiados de Guantánamo, dijo hoy a la Associated Press que no hay una oferta concreta que hacerle.

Los gobiernos de Turquía, Líbano y Qatar ya rechazaron recibir a Dhiab, agregó.

"El ultimátum cayó muy mal y el último video que grabó también", dijo Mirza antes de entrar al departamento donde vive Dhiab para entrevistarse con él y transmitirle la posición del gobierno.

Más tarde, Alejandra de Bittencourt, del grupo "Vigilia por Jihad Diyab", habló con la prensa afuera del departamento y dijo que a pedido de sus amigos y para darle más tiempo al gobierno para encontrar una solución, Dhiab aceptó tomar agua hasta el lunes que viene.

El viernes por la noche, el grupo "Vigilia por Jihad Diyab", que apoya al sirio en su protesta, subió un video a YouTube en el cual advertía que si el domingo no obtenía una respuesta concreta a sus peticiones, seguiría adelante con la huelga de hambre seca, sin comida y sin beber, y sin hacer nuevas propuestas.

Según sus allegados, Dhiab lleva más de un mes de huelga de hambre y llevaba dos semanas sin ingerir líquidos.

Horas antes, Andrés Conteris, de "Vigilia por Jihad Diyab" y también de la organización Testigos contra la Tortura, había dicho que "desde hace unos tres días Dhiab comenzó a tomar vitaminas".

El sirio abandonó Uruguay en julio y reapareció en Caracas, donde manifestó su intención de viajar a Turquía o a un tercer país para reunirse con su familia, según informó entonces la cancillería uruguaya. Tras estar un mes detenido, Venezuela lo deportó por haber ingresado sin realizar los trámites migratorios correspondientes.

En 2014 Uruguay recibió a seis ex prisioneros de Guantánamo, cuatro sirios, un tunecino y un palestino.

Estados Unidos ha usado su base en Guantánamo desde enero de 2002 para mantener a sospechosos de vínculos con Al Qaeda y el Talibán.