'Libertad' con una patineta
Zapatillas desgastadas por el constante roce de la lija con el cuero, camiseta holgada similar a los raperos de New York, que combina con su pantalón jean negro pegado a sus extremidades. En contados segundos, toma impulso con su pie derecho y de pronto siente el impacto del viento en su rostro. Él es Christian Morales, uno de los cientos de skaters que practican en la renovada pista de patinaje en el Parque de La Carolina (Quito-Ecuador), la cual tuvo una inversión de USD. 75 mil.
Para el deportista urbano, practicar el skateboarding (surfing callejero) se ha convertido en su estilo de vida. Su 'tabla' es su fiel compañera, a la cual no la abandona ni para acudir, por las tardes, a sus clases de Ingeniería en Sistemas en una reconocida universidad capitalina.
"Hace aproximadamente 2 años que estoy inmerso en el mundo del skate. Cuando patinas te da una libertad que no te puede dar otro deporte, me olvido de los problemas. Desde allí no he parado", manifestó Christian, de 19 años.
Pero como todo deporte, las lesiones no faltan y en este caso los esguinces de tobillo, rodilla, muñecas, moretones en los codos, brazos, rostro han formado parte de la lista de "caídas" que ha tenido que superar.
"Los golpes me motivan para seguir, claro que al inicio te queda ese miedo, pero a la vez es una fuente de inspiración para seguir con practicando los trucos. Cuando te caes te da más ganas de seguir patinando", exclamó Christian, mientras aplaudía a su amigo Bryan Olmedo, quien realizó un 'three sixty flip', que consiste en levantar la tabla con el pie diestro y en ese instante "patear" para el frente. Esto hace que la patineta "gire 360 grados". Para finalizar, debe caer parado sobre su instrumento y seguir en pista.
"Este es uno de los trucos que más tiempo me llevó en perfeccionarlos y aprenderlo. Se algunos trucos, pero este es el más difícil para mí", sentenció Bryan, mientras se limpiaba las gotas de sudor que bajaba por su mejilla.
Durante los ocho meses que lleva practicando el skate, Bryan ha roto unas dos tablas, en ese instante pide alrededor de USD. 50 a sus padres para poder comprarse otro "juguete" como califica a su patineta el estudiante de Arquitectura.
Los dos deportistas coincidieron que la música es un factor primordial en la práctica del skateboarding. Ellos terminaron su rutina de ejercicio bajo las líricas del rapero 2-Pac.