Comité de ética de FIFA pide multar a funcionario alemán
Investigadores de ética de FIFA recomiendan imponer una multa y horas de servicio comunitario a Helmut Sandrock, ex funcionario de la federación alemana de fútbol
Los investigadores de ética de la FIFA recomendaron el jueves imponer una multa y horas de servicio comunitario a un ex funcionario de alto rango de la federación alemana de fútbol por no informar sobre posibles casos de corrupción en torno a la Copa del Mundo de 2006.
Helmut Sandrock renunció como secretario general de la federación alemana en febrero. Su antiguo jefe, el presidente de la federación, Wolfgang Niersbach, fue suspendido del fútbol durante un año en julio, en la primera sanción de la investigación sobre la candidatura de Alemania para el Mundial. Niersbach dejó el cargo en noviembre pero continúa siendo miembro del consejo de gobierno de la FIFA y se encuentra apelando la suspensión.
El comité de ética de la FIFA halló culpable a Niersbach de no informar sobre el descubrimiento de posibles conductas antiéticas y conflictos de interés durante el proceso de la candidatura.
Sandrock está acusado de una mala conducta similar y los investigadores del comité de ética recomendaron una multa de 50.000 francos suizos (51.000 dólares), además de servicio comunitario.
La investigación involucra pagos y contratos irregulares de siete dígitos durante el proceso de la candidatura y organización de la Copa del Mundo, que implican a altos funcionarios.
El caso principal de ética de la FIFA se centra en el legendario ex jugador alemán, Franz Beckenbauer, quien encabezó el equipo organizador de la Copa del Mundo y se unió al comité ejecutivo de la FIFA en 2007; Theo Zwanziger, quien reemplazó a Beckenbauer en la FIFA en 2011; Horst Schmidt, vicepresidente del panel organizador de la Copa del Mundo; y Stefan Hans, director financiero de los organizadores. Sandrock también estuvo en el comité organizador.
Los cuatro son sospechosos de fraude, lavado de dinero, mala gestión y apropiación indebida penal en relación al pago de 6,7 millones de euros (7,3 millones de dólares) a la FIFA en 2005.
Los fiscales federales suizos y los investigadores penales y fiscales alemanes también tienen causas penales más amplias en curso sobre la Copa del Mundo de 2006, un torneo altamente exitoso en su momento al cual la nación anfitriona llamó su "cuento de verano".
