¿Quién adopta a quién?
Actualmente está muy de moda que las personas adoptemos mascotas para darle una segunda oportunidad y sacarlos de las calles donde pasan mucho trabajo, maltratos y penuria. Pero, ¿quién adopta a quién?
Yo, hace casi 2 años, decidí traer a casa una mascota para mi hija. Fuí a una jornada de adopción en la ciudad donde vivo y traje a casa una perrita de apenas mes y medio de nacida. Obviamente, al ser mestiza no me garantizaban el tamaño exacto que tendría tomando en cuenta que vivo en un apartamento. Pero no me importó, igual decidí llevarla a casa pues sus ojos y su pequeña mirada tierna ya me habían cautivado.
Le pusimos por nombre Jade, y a partir de ese momento comenzó a formar parte de nuestra pequeña familia.
Jade se convirtió en la compañera inseparable de mi hija, ya no se quedaba sola cuando yo tenía que salir a trabajar. Como toda cachorra, en ocasiones hacía sus b uenos desastres en casa y fueron varias las ocasiones en las que conseguí zapatos o libros de cuentos mordidos. Pero su nobleza y su gran amor hacían que perdonaramos sus travesuras y nivelaban la balanza del bien y el mal.
Se convirtió también en una segunda hija para mi. Es la alegría que me espera en casa cuando llegó en la noche y ya todo el mundo duerme, es mi compañera de desvelos que se echa a mi lado mientras estoy trabajando o estudiando, es esa mirada de amor que se me acerca cada mañana para darme los buenos días con un gran lenguetazo... En fin, es la clara imagen de amor, dulzura y agradecimiento reflejada en un pequeño ser de 4 patas que pareciera estar diciéndote "gracias" cada vez que tiene oportunidad.
Entonces, ¿quién adopta a quién?...
Jade fué creciendo y nos dimos cuenta de que sería una perra tamaño mediana-grande. Pero ya era muy tarde, ya la amábamos, ya era parte de la familia, ya ella nos había adoptado a nosotras.
En una ocasión una veterinaria me dijo (no se si será cierto), que por sus características parecía ser una mestiza de boxer con pitbull. Que sorpresa tan grande me llevé al escuchar eso! Realmente estaba asombrada. Normalmente creemos que esas dos razas de perro son agresivas y peligrosas, pero en realidad creo firmemente que cada perro es y se comporta de la forma en que sea criado y mi bella Jade, lo que tiene de grande, lo tiene de amor.
Ahora bien, la adopción de perros significa abrirle las puertas de tu casa y de tu corazón a ese animal con el objetivo de convertirlo en un miembro más de la familia (como hice yo con Jade), darle todos los cuidados que requiere y, sobre todo, darle la atención y el cariño que tanto necesita y merece. Evitar el abandono es fundamental, no es algo que buscas hoy y desechas mañana porque ya no te gustó, por ello es importante darse cuenta de la responsabilidad que supone tener un perro antes de adoptar uno.
También hay que tener en cuenta un aspecto del cual a veces nos olvidamos, y que es la compatibilidad de tu propia personalidad y la de tu perro. Una buena comunicación es esencial para una buena convivencia con él o ella.
Antes de adoptar a un perro, es necesario que estés perfectamente consciente de los cuidados que requiere el animal que elijas. Un perro necesita muchas cosas y requiere de mucho tiempo, un lugar para dormir, comida adecuada, un lugar para hacer sus necesidades lo cual deberás limpiar a diario, requiere ejercicio, paseos, vacunas, atención médica, baños y tendrás que proteger a tu perro de enfermedades con un plan de vacunación completo. Asimismo, mantén a tu perro alejado de los parásitos (pulgas, garrapatas y mosquitos) que, además de causarle molestias, pueden provocarle distintas enfermedades.
Por lo general, los perros que se encuentran en adopción han sido rescatados de situaciones de maltrato o abandono, por lo que necesitan mucho cariño y en ciertas ocasiones mucha paciencia mientras aprenden que no todos los seres humanos quieren hacerles daño. Darle amor es fundamental, es por eso que yo creo que mi Jade es puro amor, pues eso fué lo que recibió desde el primer día que llegó a casa
Cuando ya estés consciente de todo esto y dispuesto a tener a un animal durante toda su vida (ya que pueden vivir hasta más de 15 años), entonces ya puedes adoptar uno, o buscar uno que sin darte cuenta sea quien te adopte a ti.
Como dice un post que alguna vez leí: "Cuando a Dios se le acaban las alas, pone patitas..."