Soledad, una palabra temida por muchos, valorada por pocos
Sigo los días como si fueran una especie de guía, sin amigos, sin pareja, sin compañía, sin charlas, sin ritmo. las horas pasan lentamente, mi mente y la soledad se han hecho mejores amigas, se llevan tan bien que pasan charlando horas y horas algunas veces se ríen, otras veces se preocupan pero las dos en sí hacen una pareja ideal, ¡perfecta! como esas típicas parejas que salen en las novelas o cosas por el estilo.
Sólo que de la pareja a quien me refiero es la que tengo en mi interior, si... suena un poco épico y algo loco. Pero no es sólo mas que la verdad. La soledad se está acoplando sin problema a mi mente, se está adueñando prácticamente de todo de mí, me quita tiempo, espacio, me hace reflexionar de más, me apoya, me guía, me da cariño... incluso hasta me consciente! Y es bonito y se siente bien.
Porque independiente de todo lo que me quite, me está dando de más ¿me explico? Vaya!!! Se que muchos estando en mi lugar lo entenderán. La soledad es la mejor compañía, ella no te incomoda y ni si quiera te dice que se te ve mal eso que llevas puesto, no te molesta con mentiras y mucho menos te traiciona.
La soledad es paz, la soledad es reflexión, la soledad es amor propio, la soledad te impulsa a crear y a crecer. Porque la soledad no hace mal, la soledad es soledad una simple palabra que a muchos asusta, pero pocos saben lo agradable que es.