Dependencia Emocional, La Moderna Esclavitud

Los seres humanos hemos conquistado muchos logros en miles de años de supuesta civilización. Por suerte la moral es susceptible de evolución. Es decir cosas o situaciones que antaño eran tenidas por comunes, hoy por hoy nos resultarían aberrantes.

Hasta hace unos escasos doscientos años, la Iglesia Católica, sostenía que los hombres y mujeres de raza negra no tenían alma, esta locura y discriminación a todas luces era para hacer la vista gorda frente al tráfico esclavista desde África donde por supuesto los Señores de la Iglesia tenían su tajada. Hoy día ese argumento no resistiría el menor análisis.

También la toma de conciencia se ha extendido para con los animales, que como dijo alguien, "no sé si pueden pensar, solo sé que pueden sufrir y con eso me basta". Militantes animalistas de todo el mundo se movilizan en pro de sus derechos. La voz de los sin voz, reclama que no se los torture ni use en pruebas de laboratorios, o contra el maltrato a que son sometidos en circos y espectáculos, por la recuperación de cientos de miles de perros y gatos abandonados a su suerte en las calles, por la castración y tenencia responsable, etc. Esa lucha ha permitido importantes avances en legislaciones, pero sobretodo en la mente de las nuevas generaciones que es el único cambio verdadero.

Ahora bien, aun así, hay problemáticas que aún siguen en pie, y es más, me atrevería a decir que en rigor de verdad se ha profundizado. Hoy día en medio de los Smartphone, RR.SS, clubes de solteros, aplicaciones para encontrar pareja, sexo ocasional o amigos, etc. la criatura humana, o al menos gran parte, se halla más solo que nunca y lo que es peor, este sentimiento lo asalta aun estando rodeado de gente.

La falta de interlocutores válidos se hace notar. Lo sé por experiencia. En mi consultorio de Buenos Aires el 90% de las consultas son de esa índole. La carencia afectiva está haciendo estragos. Generando gente resentida, manipuladores, y hasta psicópatas. Así de grave puede ser. Seré conciso para no irme por las ramas. Esta clase de personas a las que la sola idea de soledad las perturba, en general, han pasado por situaciones traumáticas que no han podido resolver adecuadamente y que han ido generando patrones mentales negativos ya establecidos, y que inconscientemente refuerzan día a día. La autoestima está destruida, y en muchas ocasiones por un mecanismo intrapsíquico de compensación, este bajo concepto de su propio ser deviene en soberbia o complejo de superioridad.

El amor no lastima, no castiga, no golpea. Si eso pasa, entonces no es amor

Recuerdo ese viejo aforismo romano que reza: "Dime de que te jactas, y te diré de que careces". Es esa enorme inseguridad y el sentimiento de desamor hacia ellos mismos que los lleva a por ejemplo a que si mandan un mensaje de WhatsApp y no les contestan inmediatamente, suponen que han dejado de amarlos o que molestan, cuando en realidad jamás piensan que la otra parte puede estar ocupada en su trabajo, tomando una ducha o descansando.

Esa inseguridad destruye y autodestruye. Suelen confundir amor con sexo, diversión con compromiso, etc. y finalmente cuando ven la realidad creen que el Universo conspira contra ellos y que eso le pasa por ser así, generando sensaciones de hostilidad y resentimiento hacia el afuera que le es supuestamente hostil, el problema siempre estará en el otro o en el afuera. El círculo vicioso toma nuevo impulso y se retroalimenta generando nuevas situaciones que terminarán igual.

Esta gente no concibe el que uno transita su vida, solo. Les han inculcado que son medias naranjas cuando en realidad cada uno de nosotros somos una naranja completa. Las han educado en sentimientos de culpa sobre la sexualidad, la pareja que debe ser eterna, la hipocresía de mantener un status quo para el mundo exterior, y las grandes religiones han sabido meter mano adecuadamente en esto porque con la culpa se domina y se maneja.

Otras veces ocurre que la dependencia es trasladada desde el objeto hacia otros lados como puede ser, religiones o sectas, terapeutas, maestros o guías espirituales, etc. Así solo cambian un bastón emocional por otro. Se hace una transferencia. Parte de la solución radica en darnos cuenta de que si seguimos repitiendo la misma conducta, obtendremos pues, los mismos resultados.

Hay que replantear y modificar patrones mentales negativos. Entender que somos seres maravillosamente únicos e irrepetibles, y que podemos vivir solos o acompañados según las circunstancias pero que esto nada cambiará nuestra valía como seres humanos. No necesitamos una pareja o una familia para vender una imagen de lo que no somos. Seamos auténticos.

El amor no lastima, no castiga, no golpea. Si eso pasa, entonces no es amor. El amor no es un derecho adquirido "per se" por el solo hecho de nacer. A veces ocurre y a veces no. Hay gente que lo conoce y otros que no lo conoceremos jamás.

El amor es un pequeño milagro que no a todos les ocurre. De todas maneras vale la pena ser libres, no darles la llave de nuestra felicidad a nadie, tomar las riendas de nuestra vida, no permitas que te maltraten y si no puedes solo, busca ayuda de terapias e intervenciones breves como la Gestalt o Transpersonal.

Cuando puedas dejar tus mochilas de piedras detrás estarás más liviano y habrá lugar para que cosas nuevas lleguen. Suerte en ese camino.