Las Mujeres de Japón Pelean Para Ganar
TOKYO - Olvídate de los árboles de cerezo y las delicadas rebanadas de pescado crudo. El Japón en el que Kris Hernandez ha plantado sus sueños es de golpes de cuerpo, sudor y llamativa vestimenta- el mundo de la lucha libre femenina.
"Yo me enamor de este deporte - del drama, del entusiasmo," dijo la estadounidense de 31 años de edad después de su primer encuentro con este lado inusual de Japón.
"Yo estaba al borde de mi asiento pensando, ¿oh Dios mio, como asi no están muertos?, ¿podría yo hacerlo y vivir de este deporte?, déjame tratarlo"
Hernández, que vivía en san Francisco antes de vivir en Japón, fue la primera extranjera en entrenar desde lo más básico y trabajar hasta conseguir llegar a la lucha libre japonesa femenina.
Si me ahorraba un día la tarifa del tren, estaba bien
Ella dejó su trabajo de profesora y empezó a compartir una casa con mujeres que también practicaban el deporte de la lucha. Comenzó viviendo de sus ahorros mientras entrenaba arduamente con un régimen de entrenamiento muy duro que incluye movimientos de gimnasia.
"Yo era muy pobre en ese entonces, pero quería convertirme en una luchadora con todas mis fuerzas. Solía caminar cuatro horas para llegar a la práctica, entrenar tres horas y luego tomar el tren de regreso." Dijo Hernández.
"Si me ahorraba un día la tarifa del tren, estaba bien"
Hizo su debut en Agosto 2014 bajo el nombre Kris Wolf, usando una vestimenta con cabeza y cola de lobo.
Hasta en este mundo, en el cual Hernández dice que son mucho más drásticos que su colega de los Estados Unidos, la ley de la jerarquía japonesa juega un papel muy importante.
"Es como en militar - No hables a tu superior al menos de que te hable primero, limpia, quédate hasta que todos los superiores se hayan retirado, después te vas. Llega 30 minutos antes que los superiores." Kris dijo
El dinero no es gran cosa, ella gana $250 dolares por un show de una semana.
"Yo lo estaba haciendo porque era genial" dijo Hernández, quien ahora se está tomando un descanso después de haber sufrido una conmoción cerebral.
He conocido muchas que son dulces y tímidas fuera del cuadrilátero, pero apenas suben al cuadrilátero explotan.
La brutal realidad del cuadrilátero está maquillada por la fantasía que alimentan a sus fanáticos, los cuales la mayoría son hombres.
Pero la agresividad puede ser una salida para luchadoras, en un país donde se espera que las mujeres sean tímidas y adorables. Expresó Hernández.
"Algunas veces es una parte de ellas que no pueden expresar normalmente."
"He conocido muchas que son dulces y tímidas fuera del cuadrilátero, pero apenas suben al cuadrilátero explotan."